Para la evacuación de personas de Afganistán, Estados Unidos apeló a una alianza militar-civil posterior a la Segunda Guerra Mundial que se ha activado solo dos veces antes: en 1990-1991, durante la Guerra del Golfo; y en 2003, durante la invasión de Irak.
La Flota Aérea de Reserva Civil (CRAF en inglés) es un «programa cooperativo y voluntario» entre el gobierno y las aerolíneas privadas, que permite al Ejército estadounidense utilizar aviones comerciales en situaciones de emergencia cuando necesita capacidad adicional.
El origen de la asociación se remonta a la salida de Berlín durante la Guerra Fría y permite al Departamento de Defensa (DOD) «aumentar la capacidad de los aviones durante una crisis relacionada con la defensa nacional», según el Departamento de Transporte.
Las compañías aéreas ofrecen voluntariamente sus aeronaves al programa CRAF a través de acuerdos contractuales con el Comando de Transporte de Estados Unidos (Ustranscom), que maneja el sistema global de transporte de defensa estadounidense.
A cambio, «los transportistas participantes tienen preferencia en el transporte de carga comercial en tiempo de paz y tráfico de pasajeros para el DOD».
Todos los participantes de la CRAF deben ser transportistas estadounidenses totalmente certificados por la Administración Federal de Aviación (FAA).
Guerra del Golfo
La CRAF la crearon el 15 de diciembre de 1951, menos de tres años después de que aviones civiles los convocaran para aliviar el bloqueo soviético de Berlín, y no lo activaron hasta la Guerra del golfo a comienzo de 1990.
Para la «Operación Tormenta del desierto», de agosto de 1990 a mayo de 1991, el Pentágono inicialmente requisó 38 aviones pertenecientes a 16 compañías para transportar tropas y materiales al golfo Pérsico.
Pero en enero de 1991, el entonces secretario de Defensa, Dick Cheney, pidió aviones adicionales. Fueron requisadas 181 aeronaves, pertenecientes a 20 aerolíneas.
Invasión de Irak
La segunda activación de la CRAF fue de febrero a junio de 2003, durante la «Operación Libertad iraquí».
En esa ocasión, el secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, pidió a 22 aerolíneas que proporcionaran 47 aviones y 31 aviones de carga para el transporte de pasajeros y equipo militar.
Salida de Afganistán
El domingo, el secretario de Defensa, Lloyd Austin, ordenó la activación de la CRAF para ayudar en la «evacuación de Afganistán de ciudadanos y personal estadounidenses, solicitantes de SIV y otras personas en riesgo».
Los aviones civiles no volarán a la capital afgana controlada por los talibanes, sino que se usarán para trasladar pasajeros desde refugios temporales seguros a sus destinos finales.
Esto permitirá a los aviones militares concentrarse en operaciones de salida e ingreso a Kabul, dijo el Pentágono en un comunicado.
En total, 18 aviones de las compañías American Airlines, Atlas Air, Delta Air Lines, Omni Air, Hawaiian Airlines y United Airlines, serán utilizados para evacuar a las personas que huyen de los talibanes en Afganistán.
El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!
Apoya a El Nacional