El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, prometió el jueves una movilización digna de «tiempos de guerra» contra el covid-19 y los países de la Unión Europea (UE), alarmados por las nuevas cepas, buscan intensificar los controles.
Un día después de su investidura, Biden se mostró como la contracara de su antecesor Donald Trump y denunció el «terrible fracaso» de la distribución de vacunas en su país, el más castigado del mundo por la pandemia.
«Nuestra estrategia se basa en la ciencia no en la política, en la verdad, no en la negación», dijo al firmar una decena de decretos cuando Estados Unidos acumula más de 409.600 fallecimientos por el covid-19, una cantidad que supera la de sus soldados caídos en la Segunda Guerra Mundial.
Bajo las nuevas medidas, los viajeros que lleguen por avión a Estados Unidos deberán presentar un test negativo y guardar cuarentena.
Los otras órdenes incluyen fortalecer el programa de vacunación y expandir los requisitos de usar máscaras al transporte público.
Biden, que en su investidura había dicho que la pandemia se encamina hacia su «fase más dura y más mortal», busca vacunar a 100 millones de personas en 100 días, aumentar el uso de máscaras y tests, aumentar el personal en salud y ofrecer alivio económico a los afectados por las restricciones.
De su lado el inmunólogo y asesor presidencial Anthony Fauci señaló que Estados Unidos «cumplirá con sus obligaciones financieras» con la Organización Mundial de la Salud a la cual retornó por decisión de Biden.
Estados Unidos también se sumará a la alianza internacional Covax estructurada por la OMS para facilitar a los países más desfavorecidos el acceso a las vacunas.
Enorme Esfuerzo
La Europa de los 27, reunida por la noche para una cumbre virtual dedicada a la pandemia, también prepara nuevas acciones.
«Estamos cada vez más inquietos por las diferentes variantes» del coronavirus, dijo la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, quien estimó que «todos los viajes no esenciales» deberían «ser fuertemente desaconsejados».
En vísperas de la cumbre, los europeos habían logrado acordar el reconocimiento mutuo de los resultados de las pruebas, tanto de PCR como de antígenos rápidos, lo cual fue validado el jueves por la noche.
Para detectar mutaciones del coronavirus, la Comisión Europea instó a los estados de la UE a aumentar la secuenciación genética del virus. También pidió que aceleraran las campañas de vacunación.
«Es un gran esfuerzo pero es factible», dijo von der Leyden.
De su lado, la agencia europea de vigilancia sanitaria, con sede en Estocolmo, dijo que el Viejo Continente debe prepararse para tomar medidas más estrictas en «las próximas semanas». La agencia pidió preservar las capacidades sanitarias y acelerar también las campañas de vacunación.
Algunos países no esperaron a los avisos. Portugal, que ha batido récords de contagios, anunció el cierre de sus escuelas durante 15 días.
El parlamento holandés aprobó el primer toque de queda que se impone en el país.
En España, que volvió a registrar un récord de casos el jueves, con más de 44.000 nuevas infecciones, las regiones urgen al gobierno central a que les autorice a tomar medidas más duras.
Situación caótica en Manaos
En todo el mundo, la pandemia se ha cobrado ya al menos 2,07 millones de vidas y las autoridades están alarmadas ante la aparición de las nuevas variantes del virus surgidas en Reino Unido, Sudáfrica y Brasil, debido a su mayor capacidad de infección.
La cepa británica ya ha llegado al menos a 60 naciones, según la OMS, mientras que la sudafricana ha sido detectada en 23 países y territorios.
El gobierno brasileño anunció que finalmente recibirá el viernes las dos millones de dosis de la vacuna de AstraZeneca/Oxford fabricadas en India, lo cual le permitirá reforzar la campaña de inmunización iniciada esta semana.
Pero en la ciudad de Manaos la vacunación fue suspendida, tras denuncias de fraude en la administración de dosis a personas de grupos no prioritarios.
La situación en la región es caótica. Con casi 240.000 casos y más de 6.500 fallecidos, Amazonas es el segundo de los 27 estados brasileños con la mayor tasa de muertos por 100.000 habitantes.
Solo superado por Estados Unidos, Brasil acumula 212.831 muertos por la pandemia, así como 8,6 millones de infecciones.
Sin Carnaval
Rio de Janeiro descartó celebrar este año su famoso Carnaval, que en principio había pasado de febrero a julio, debido al repunte de la pandemia en Brasil, informaron las autoridades
México, que empezó a vacunar el 24 de diciembre, registró este jueves nuevos máximos diarios de contagios y fallecimientos por covid-19. El país contabilizó 22.339 contagios en las últimas 24 horas para un total acumulado de 1.711.283 desde el inicio de la pandemia, según un reporte oficial.
Enfrentada a una segunda ola de contagios que amenaza colapsar sus hospitales, Colombia alcanzó este jueves el umbral de 50.000 muertes.
El nerviosismo ante el gigantesco desafío mundial de la vacunación se expande a otros países.
Médicos panameños denunciaron haber quedado fuera del plan de vacunación iniciado el miércoles, mientras se ha privilegiado a otros funcionarios, lo que niegan las autoridades.
La región de Madrid se vio obligada a suspender temporalmente la campaña de inyecciones, ante falta de dosis.
Ecuador también inició su campaña de vacunación, de la mano de las farmacéuticas Pfizer/BioNTech.
En India un incendio afectó las instalaciones del mayor fabricante del planeta, Serum Institute, con saldo de cinco muertos. Las autoridades dijeron que el siniestro no afectará a la capacidad de fabricación.
Serum Institute debe suministrar millones de dosis a Brasil, entre otros países.
Y en Sudáfrica, se aplicaron las primeras dosis de la vacuna desarrolladas por AstraZeneca/Oxford, casi 2,5 veces más caras que en Europa.
Un recuento de la AFP del jueves señala que 63 países o territorios han iniciado campañas de vacunación. Pero 12 países concentran el 90% de los 54 millones de dosis inyectadas.