El Pentágono confirmó este jueves que se produjo una explosión frente al aeropuerto de Kabul en Afganistán, donde Estados Unidos y otros países han estado evacuando a decenas de miles de personas tras la toma de poder de los talibanes a mediados de agosto.
«Podemos confirmar una explosión fuera del aeropuerto de Kabul. No está claro por el momento si hay víctimas», tuiteó el portavoz del Pentágono, John Kirby.
Según una fuente militar, la explosión ocurrió cerca de Abbey Gate, uno de los tres puntos de acceso al aeropuerto donde miles de afganos se han aglomerado en los últimos 13 días buscando huir de los islamistas radicales.
Las imágenes que circulan en las redes sociales dan cuenta de que hay varios heridos.
Otros informes sitúan la detonación cerca del Hotel Baron, cercano a Abbey Gate, que las naciones occidentales han utilizado para organizar algunas evacuaciones.
Funcionarios estadounidenses y aliados habían informado en los últimos días sobre amenazas creíbles de ataques suicidas cerca del aeropuerto de Kabul, donde se ha organizado un gigantesco operativo de salida de personas desde el 14 de agosto.
Según la información de inteligencia, atacantes suicidas vinculados al brazo afgano del grupo yihadista Estado Islámico, apodado Estado Islámico-Khorasan, amenazaban con atacar el aeropuerto antes del 31 de agosto, fecha límite fijada por Washington para la retirada de Afganistán tras dos décadas de intervención.
Minutos antes de informar sobre la explosión, Kirby negó reportes de que las evacuaciones de civiles podrían terminar antes de lo esperado debido a las amenazas. «Continuaremos evacuando a la mayor cantidad posible de personas hasta el final de la misión», tuiteó.
«Las operaciones de evacuación de Kabul no terminarán en 36 horas», aseguró.
Las tropas estadounidenses, que controlan el aeropuerto en la capital afgana, deben salir de Afganistán el martes. La retirada deberá comenzar antes, haciendo más complejas las evacuaciones de extranjeros y afganos considerados en peligro desde la toma del poder por los talibanes.
El ritmo de las salidas, acelerado en los últimos días, ha comenzado a ralentizarse.
Un informe de la Casa Blanca el jueves por la mañana señaló que 13.400 personas han sido evacuadas en las últimas 24 horas (5.100 a bordo de 17 aviones militares estadounidenses y 8.300 en 74 aviones de la coalición).
Desde que comenzó el operativo de vuelos de salida el 14 de agosto, Estados Unidos ha ayudado a evacuar a unas 95.700 personas. Muchos países aliados de Estados Unidos han anunciado el inminente fin de sus propias operaciones. Algunos, como Canadá, ya detuvieron sus evacuaciones.
El miércoles, la Embajada de Estados Unidos en Afganistán emitió un aviso advirtiendo a los estadounidenses que no se acercaran al aeropuerto de Kabul. Dijeron que había amenazas de seguridad en los accesos a esas instalaciones, señaló EFE.
El embajador estadounidense Ross Wilson dijo este jueves en una entrevista con la cadena de televisión ABC News antes de que se produjera la explosión que esas amenazas son creíbles e inminentes.
El domingo, el secretario de Estado Antony Blinken advirtió de los crecientes riesgos de seguridad a medida de que pasan los días en Afganistán. Subrayó que el operativo de evacuación tiene lugar en un ambiente hostil ahora controlado por los talibanes y con la muy real posibilidad de un ataque del Estado Islámico.