Un ecuatoriano que llevaba 40 años residiendo en Venezuela murió este lunes, al parecer de un infarto, en el paso de Rumichaca, en la frontera entre Colombia y Ecuador. El hecho ocurrió en medio de las protestas de venezolanos por la imposición de una visa especial para entrar a territorio ecuatoriano.
Luis Alberto Araujo Casamen, de 58 años de edad, que venía desde Caracas, con rumbo a Ecuador, comenzó a sentirse mal al llegar a las dependencias de la migración en el lado colombiano de la frontera internacional, indicó a Efe el asesor encargado de recibir a los viajeros a uno y otro lado de la divisoria.
El motivo del viaje era que necesitaba un medicamento que no tenía a disposición en Venezuela y se le iba a suministrar en Ecuador.
«Llega a Migración colombiana y se sintió mal, y en Cruz Roja Colombiana le dan oxígeno y supera momentáneamente la indisposición», explicó el encargado de recibirlo cuando se bajara del autobús colombiano para acompañarlo a otro transporte que lo iba a llevar a Quitumbe, en el sur de Quito.
Pero al cruzar el puente internacional y límite territorial entre Colombia y Ecuador, «el hombre se sintió presionado al ver a tanta gente y sufrió un infarto», informó la fuente.
Protestas
En ese preciso momento cientos de venezolanos se concentraron en el puente sobre el río Rumichaca para bloquear el tráfico y pedir a las autoridades ecuatorianas que les permitieran el acceso, lo que originó un tumulto y la interrupción del tráfico en sentido a Colombia, que después de más de dos horas no se ha reanudado.
Después de que la policía judicial declarara el deceso, se levantó el cadáver, que fue trasladado a la morgue del hospital de Tulcán (ciudad fronteriza), donde será sometido a una autopsia.
Fuentes de la policía indicaron que se trató de un nuevo caso de «mal de altura», aparentemente agravado por una condición previa respiratoria.
Los familiares del viajero han sido informados del suceso y se desplazan desde Quito hasta Tulcán, indicó la fuente.
Al grito de «¡queremos pasar!» cientos de emigrantes venezolanos impidieron este lunes un tramo del paso internacional de Rumichaca, pues protestaban por la negativa de las autoridades ecuatorianas a dejarles entrar en el país sin una visa humanitaria especial.
Con el nuevo requisito de una visa de carácter humanitario, el Ejecutivo ecuatoriano busca «regularizar» la entrada del éxodo de los venezolanos al país, buena parte del cual se desplaza hacia Perú, que también implementó una medida similar hace dos meses.
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