Los ex gobernadores de Río de Janeiro Anthony Garotinho y su esposa Rosinha Matheus, ambos acusados de corrupción, fueron detenidos de nuevo este miércoles, después de que la Justicia dejara sin efecto un habeas corpus que mantenía al matrimonio en libertad.
Agentes de la Policía Civil arrestaron a los dos ex gobernadores en su casa para cumplir con sendos mandatos de prisión preventiva expedidos por la Justicia y solicitados por el Ministerio Público.
La Fiscalía acusa al matrimonio de dificultar las investigaciones e incluso de amenazar a un testigo clave del caso en el que son investigados por fraude en contratos públicos con la constructora Odebrecht.
Las autoridades sostienen que los dos ex gobernadores participaron en una red corrupta que inflaba el valor de contratos en Campos, ciudad en el litoral norte del estado de Río de Janeiro.
Garotinho, un pastor evangélico y locutor de radio que gobernó Río de Janeiro entre 1999 y 2002, y Matheus, que ocupó el mismo cargo entre 2003 y 2006, ya pasaron por la cárcel en otras ocasiones.
La última el mes pasado, aunque un día después fueron puestos en libertad gracias a un habeas corpus ahora negado.
“La orden de prisión es ilegal”
La pareja también fue acusada de liderar una organización criminal que recaudó recursos de forma ilícita, incluso mediante extorsiones a empresarios, para financiar sus campañas electorales y las de sus aliados entre 2010 y 2016.
El abogado de ambos, Vanildo da Costa Júnior, afirmó en una nota enviada a los medios que recurrirá la orden de prisión preventiva ante el Superior Tribunal de Justicia.
«La orden de prisión es ilegal y arbitraria, basada apenas en suposiciones y conjeturas genéricas sobre hechos extemporáneos”, indicó el letrado.
Otros antiguos gobernadores de Río de Janeiro están actualmente en prisión también por corrupción.
Luiz Fernando Pezao (2014-2018) y Sergio Cabral (2007-2014), este último condenado ya 12 veces y con penas acumuladas de 267 años de prisión.