En el Consulado de Venezuela en Nueva York las solicitudes de pasaportes estaban amontonadas junto a obras de arte apiladas y afiches con el rostro del ex presidente Hugo Chávez cuando los delegados de Juan Guaidó, presidente interino de la República, tomaron el control de esa sede.
«Estamos liberando espacios… estamos convencidos que más temprano que tarde Venezuela entera va a estar libre de usurpación», dijo a la prensa Gustavo Marcano, nombrado ministro consejero por Guaidó.
El lunes, Carlos Vecchio, representante de Venezuela en Washington designado por Guaidó, reconocido como presidente encargado por más de 50 países, anunció la toma del control de tres sedes diplomáticas.
El consulado en Nueva York, que está ubicado en un edificio de seis plantas en la calle 51, a unas cuadras de la sede de la ONU, «estaba siendo ocupado de manera ilegal por funcionarios del régimen de Nicolás Maduro acreditados ante las Naciones Unidas, que no tienen ningún tipo de cualidad jurídica para estar aquí», dijo Marcano, ex diputado a la Asamblea Nacional.
«Cuando pisamos este consulado el día de ayer sentimos que los venezolanos que hemos luchado por la libertad, que hemos sufrido, que hemos padecido toda esta lucha contra el narcorrégimen que lidera Nicolás Maduro, vamos conquistando espacios», agregó.
Mientras Marcano recorría la sede del consulado, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reiteraba en Washington frente a su homólogo brasileño, Jair Bolsonaro, que «todas las opciones están sobre la mesa» para deponer a Nicolás Maduro.
Algunas salas habían sido vaciadas, pero todavía quedaban afiches conmemorativos de Chávez, mapas de Venezuela, peticiones de pasaportes y ropa en los armarios.
Elementos de carácter criminal
En otro sitio estaban amontonadas obras de arte y en la sala de informática faltaban computadoras y hasta servidores.
«Se desmanteló todo el área de los servidores que servían para el registro consular», dijo Marcano, que consideró que «puede haber elementos que tengan carácter penal criminal» y que «serán presentados a las autoridades».
En la entrada de la sede diplomática los nuevos responsables de la oficina colocaron un letrero en el que se lee: «Pronto abriremos las puertas de este consulado, para que todos podamos volver a casa».
Vecchio informó que en los próximos días su misión tomará posesión de la embajada en Washington.
Un portavoz del Departamento de Estado, que reconoce a Guaidó como presidente interino y considera que Maduro está usurpando el poder, confirmó el respaldo del gobierno de Donald Trump a este operativo.
«Esta es una acción bienvenida para nuestras relaciones bilaterales (…) La política estadounidense apoya la democracia en Venezuela, al presidente interino Guaidó y a la Asamblea Nacional, que es la única institución democráticamente electa en el país», dijo a la AFP.
El lunes el cancillerJorge Arreaza, leal a Maduro, denunció en Caracas la «ocupación forzosa e ilegal» de las misiones.