La Gobernación de la región boliviana de Santa Cruz (este), la más próspera de Bolivia, declaró desastre departamental por los incendios que han afectado más de 460.000 hectáreas.
En una rueda de prensa en Santa Cruz, el gobernador de esa región, Rubén Costas, informó este domingo sobre esa decisión, tomada por la «dramática situación» que están viviendo en el departamento y la gran vulnerabilidad que existe por los incendios.
La declaración de desastre facilitará la actuación coordinada con el gobierno nacional, que envió a Santa Cruz al ministro de Defensa, Javier Zavaleta, y al viceministro de Defensa Civil, Oscar Cabrera, con ese propósito.
El presidente boliviano, Evo Morales, aseguró en Twitter que las autoridades nacionales están haciendo un «seguimiento permanente a los focos de incendio en Santa Cruz».
Permanecemos movilizados y hacemos seguimiento permanente a los focos de incendio en #SantaCruz. Anoche instruimos que el ministro de Defensa se traslade a esa ciudad para coordinar acciones de contingencia. Pedimos a la población colaborar y acatar todas las medidas preventivas.
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) August 18, 2019
«Pedimos a la población colaborar y acatar todas las medidas preventivas», agregó Morales.
Unas 468.904 hectáreas han sido afectadas por los incendios forestales en Santa Cruz, que comenzaron hace unos 10 días.
Afectados
Los municipios declarados en desastre por los incendios son Roboré y San Ignacio de Velasco.
Si bien las labores para controlar el fuego se desarrollan también en otras localidades como San Rafael, Charagua, Concepción, San Matías y San José de Chiquitos.
El incendio de mayor magnitud se registró en Roboré.
Allí están desplazados instructores de bomberos forestales de la Gobernación, bomberos voluntarios, técnicos de municipios, militares y personal de Defensa Civil para proteger a las comunidades que pudieran verse afectadas.
San Ignacio de Velasco, San José y Concepción son parte de la Chiquitania, una de las principales zonas turísticas de Bolivia donde están asentadas las misiones jesuíticas, declaradas patrimonio de la Unesco y consideradas de las mejor conservadas de América.
También preocupa la llegada del fuego a la reserva forestal de Tucavaca, cerca de Roboré, que protege una porción del «bosque seco chiquitano». Además de fuentes de agua que son la base del sistema hídrico regional, según datos de la Gobernación cruceña.
«Extremados esfuerzos»
Costas destacó la labor de los bomberos voluntarios.
«Han hecho extremados esfuerzos para poder combatir el fuego en Santa Cruz, incluida la capital regional, donde en las últimas horas hubo una veintena de incendios, lo que es preocupante», dijo.
El gobernador mencionó que el sábado hubo un incendio en el aeropuerto internacional de Viru Viru, el mayor de Bolivia, que se pudo controlar después de algunas horas.
«Casi 100%» de estos incendios son provocados por los hombres mediante la quema de basura en las ciudades o el «chaqueo».
A ello se suman las ráfagas de viento de 80 o 90 kilómetros por hora que se han registrado en Santa Cruz, con lo que «no hay poder humano que lo pueda detener», indicó.