El desabastecimiento que enfrenta Cuba ha exacerbado los ánimos de los ciudadanos en los últimos meses. A pesar de la fuerte represión por parte del régimen, los ciudadanos han comenzado a protestar ante lo que muchos han denominado apartheid caribeño.
Buscando calmar a ese sector de la población que está molesto, o reafirmar el apoyo de sus seguidores, el régimen de Miguel Díaz-Canel ha puesto en prácticas algunas medidas.
Una de esas medidas es la que reseña este 22 de septiembre el periódico estatal Invasor: vender tres libras de carne de cerdo por casa a cubanos en cuarentena. Es el caso de los que residen en la calle Maceo, entre Cuba y Ciego de Ávila, en el municipio cabecera de la provincia Ciego de Ávila.
Cierre
A la mencionada cuadra no entra ni sale nadie. «Sin embargo, el miedo se ha esparcido con una intensidad que cala a Belkis Rodríguez Rodríguez, y no porque viva ‘pared con pared’ de la vivienda que registrara dos casos positivos, sino porque hacía ya 10 días del hecho y las autoridades sanitarias no habían vuelto», escribió el Invasor.
«¿Habré tocado la baranda del portal, alguien de la cuadra habrá pasado y hecho lo mismo?, no sé. Aquí nadie ha venido a pesquisar y tenemos, solo en esta cuadra, 10 diabéticos», comenta desde la franja que aísla a la cuadra Fernando Callejas, entre C y D, con la doble función de ser ella quien impide el paso hacia la zona roja.
Belkis explica que allí lo que impera es evitar la entrada y no la salida de la gente, pues son los de afuera los que insisten en visitar familiares o traer alimentos. Agrega que gracias al mensajero, que va hasta la placita a hacer las compras, y a que les vendieron tres libras de carne de cerdo por casa, y a que una vez un camión se parqueó cerca, vendiendo dulces, papas y mermeladas, es que han podido cumplir la restricción.
«¿Pero qué son tres libras de carne por vivienda? ¿Cuántas raciones de comidas se pueden preparar con tres libras de carne? Es como si estuviéramos a las puestas de una hambruna inevitable, con la complicidad alegre de quienes la van a sufrir». Reseñó ADN Cuba.