Cuba afirmó este martes que un eventual levantamiento del bloqueo económico, comercial y financiero que le aplica Estados Unidos beneficiaría no solo a ambos países sino las relaciones económicas internacionales.Al inaugurar la Feria Internacional de La Habana (FIHAV 2015), el ministro cubano de Comercio Exterior e Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca, hizo ese señalamiento tras recordar que esa política norteamericana persiste a pesar del rechazo internacional que fue ratificado recientemente por 191 países con su votación en la Asamblea General de Naciones Unidas.»El fin del bloqueo (como se define en Cuba al embargo económico de EE UU) será un paso en favor de las relaciones económicas internacionales, no solo a nivel bilateral entre Cuba y Estados Unidos», indicó Malmierca en su discurso inaugural.El ministro recalcó que el bloqueo aplicado por EE UU desde hace más de cinco décadas es el principal obstáculo para la normalización de las relaciones entre los dos países que restablecieron sus vínculos diplomáticos el pasado 20 de julio.Además de manifestar el propósito de tener relaciones económicas y comerciales diversificadas con todo el mundo, Malmierca señaló que la legislación cubana no discrimina a ninguna empresa por su origen, y en ese sentido refirió el interés de muchos empresarios estadounidenses por hacer negocios en Cuba.»Les daremos la bienvenida (a empresarios de EE UU), para participar en el mercado cubano en igualdad de condiciones con los del resto del planeta», afirmó.Expresó la voluntad de continuar estrechando los vínculos económicos con los socios tradicionales de la isla, como Venezuela, China, Rusia y España.»Nuestra aspiración es hacer buenos negocios, con socios serios, en beneficio de ambas partes», añadió el ministro.Informó que durante el primer semestre de este año el país caribeño cerró con un aumento del Producto Interno Bruto (PIB) de 4,7% con una perspectiva estimada de finalizar 2015 con un crecimiento de alrededor de 4%.Malmierca dijo que este resultado rompe con la tendencia a la desaceleración del crecimiento de la economía cubana en los últimos años, y ha estado respaldado por la industria, la construcción, el comercio, la actividad turística y la producción agropecuaria.