La Corte Suprema de Justicia vinculó formalmente al ex presidente Álvaro Uribe con el proceso que le sigue por presunto fraude procesal y soborno de testigos después de una indagatoria que duró más de siete horas.
“Al concluir la indagatoria, el senador Álvaro Uribe Vélez quedó formalmente vinculado al proceso que adelanta la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia por los delitos de fraude procesal y soborno en concurso homogéneo y sucesivo”, señaló el alto tribunal en sus redes sociales.
Tras la indagatoria, los magistrados de la Sala de Instrucción de la Corte tomaron esa determinación, con lo que más adelante podrán adoptar otras decisiones, que incluso pueden llegar a la imputación de cargos.
El caso del ex mandatario comenzó en 2012 cuando demandó por manipulación de testigos al senador de izquierda Iván Cepeda, que preparaba entonces una denuncia en su contra, en el Congreso, por supuestos vínculos con el paramilitarismo.
No obstante, la demanda se le convirtió en un bumerán, puesto que el magistrado José Luis Barceló no solo archivó el caso, sino que decidió abrir una investigación al ex presidente por supuesta manipulación de testigos contra el senador de izquierda.
Fuentes del alto tribunal confirmaron a Efe que Uribe hizo la indagatoria completa, por lo que no tendrá que volver a continuar su testimonio. En ese sentido, la Corte pidió a los colombianos confiar en la justicia durante el proceso.
Manifestaciones en pro y en contra
“Frente a las voces que atacan la legitimidad de las instituciones frente a la investigación penal contra el senador Álvaro Uribe Vélez es imperativo llamar a la cordura y a la confianza en la justicia”, afirmó el presidente de la Corte, magistrado Álvaro García.
A lo largo de la jornada hubo manifestaciones -frente al Palacio de Justicia- de simpatizantes y opositores de Uribe, que no llegaron a enfrentarse por la intermediación de la policía.
Con el grito “¡Uribe, amigo, Colombia está contigo!”, miles de personas se reunieron en el Parque Nacional para defender al líder político. Mientras tanto, sus detractores protestaron frente a ellos por las innumerables violaciones de los derechos humanos que consideran cometió durante su gobierno.
Al respecto, el presidente de la Corte Suprema de Justicia señaló que ninguna presión, manifestación o protesta pública influirá en las decisiones que están obligados a tomar los magistrados en ejercicio de su función.
“Los jueces solo se basan en las pruebas legalmente incorporadas a los expedientes y los contenidos de la Constitución y las leyes”, agregó.
No obstante, indicó que el tribunal destaca el valor de la libertad de expresión en las manifestaciones ciudadanas como esenciales en un Estado de derecho, independientemente de las tendencias políticas o causas que la motiven.
“La libre defensa de las ideas en escenarios civilizados enriquece la democracia”, añadió.