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Condenaron a cadena perpetua a expolicía de Nueva York por el asesinato de migrantes mexicanos

por Avatar EFE

Una corte federal condenó el lunes a un expolicía de Nueva York a cumplir cuatro cadenas perpetuas por los asesinatos de cuatro migrantes mexicanos en 2016. Agentes del FBI hallaron los cadáveres en una propiedad del individuo ocho meses después de que las víctimas desaparecieran de un bar en el norte del estado.

Nicholas Tartaglione, de 56 años de edad, debe cumplir las penas consecutivamente por las muertes de Martín Luna y sus sobrinos Miguel Luna y Urbano Santiago, así como de Héctor Gutiérrez, un amigo de la familia.

A ellos los secuestró y asesinó el 11 de abril de 2016 porque sospechaba que Martín le había robado 250.000 dólares destinados a la compra de cocaína, de acuerdo con la Fiscalía para el Distrito Sur de Nueva York.

Al dar a conocer la sentencia, el juez Kenneth Karas se refirió a Tartaglione como un «monstruo» que no ha mostrado ningún remordimiento por su conducta, señala un comunicado.

Durante el juicio, el año pasado la Fiscalía señaló que Tartaglione contó con cómplices y que había planificado su venganza. Atrajo a Martín para que se reuniera con él en un bar, donde este acudió con sus dos sobrinos y un amigo.

Lo golpeó por más de una hora

Tartaglione llevó luego a Martín a su finca, donde le inmovilizó y torturó golpeándolo durante más de una hora, y finalmente lo estranguló con una brida frente a allegados porque no le dijo dónde estaba el dinero que buscaba.

Luego Urbano, de 35 años de edad; Miguel, de 25 años, y Héctor, de 43 años, fueron llevados por el expolicía y dos cómplices a un lugar boscoso, donde los asesinaron con un tiro en la nuca porque presenciaron el asesinato de Martín, señaló la Fiscalía.

Indicó además que a las cuatro víctimas las enterraron en una fosa común en una propiedad del expolicía, donde los halló el FBI en diciembre de 2016.

Tartaglione posteriormente fue compañero de celda del financiero condenado por abuso sexual Jeffrey Epstein.

«Gracias a los incansables esfuerzos de innumerables agentes del orden a nivel federal, estadal y local, y a la incesante búsqueda de justicia de los fiscales de mi oficina, Tartaglione ha tenido que rendir cuentas por sus crímenes», dijo el fiscal federal Damian Williams.