Un Tribunal de Sentencia de Tegucigalpa, Honduras, condenó este miércoles a 58 años de cárcel a la ex primera dama Rosa Elena Bonilla, esposa del ex presidente Porfirio Lobo.
La sentencia fue dictada sin la presencia de Bonilla ni del ex mandatario, quien calificó de «injusta» la decisión de la justicia de declararla culpable.
Bonilla fue condenada a 10 años de prisión por apropiación indebida y a 6 años por cada uno de los 8 delitos de fraude, que suman 48, para «un total de 58 años de reclusión».
Multa de 48.387 dólares
Además de la condena a pagar 58 años de cárcel, de los que por ley no puede cumplir más de 30, a Bonilla se le impuso una multa de 1,2 millones de lempiras, unos 48.387 dólares.
Esto equivale al 10% de más de 12 millones de lempiras, unos 495.967 dólares, que habría desviado de los fondos del Despacho de la Primera Dama, a cuentas bancarias personales suyas.
«Es un linchamiento»
Luego de conocer la sentencia contra su esposa, el ex presidente Lobo la calificó como un «linchamiento».
Dijo que se trata de una «presea» que el presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, «le prometió» a Luis Almagro, secretario general de la Organización de Estados Americanos.
A su juicio, a través de la Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras, que depende del ente hemisférico.
«Con el linchamiento de mi querida Rosa, Almagro tiene la presea que le prometió su socio Hernández, a cambio de que le siga encubriendo sus varios actos de corrupción», escribió en Twitter.
El presunto acuerdo, asegura Lobo, sería condicionado a la continuidad en Tegucigalpa de la Maccih, cuyo período de cuatro años se vence en 2020, sin que se conozca si será renovado.
Añadió que a su esposa se le condenó «sin importar las violaciones a sus derechos humanos constitucionales y legales».
Desde que Lobo conoció el 20 de agosto que su cónyuge fue declarada «culpable» por los delitos de corrupción, anunció que apelaría ante la Corte Suprema de Justicia.
Expresó además que, de no tener una respuesta favorable, acudirá a otras instancias internacionales, como la Corte Centroamericana de Justicia.
Sentencia contra Bonilla
La sentencia contra Bonilla la absuelve del delito de malversación de caudales públicos en contra de la administración pública.
Bonilla, para quien el Ministerio Público pedía 77 años de cárcel, fue capturada y remitida a prisión el 28 de febrero de 2018.
Ello, por un caso denominado «La caja chica de la dama», en el que una ex primera dama ha sido acusada y condenada.
La justicia hondureña también condenó, por el mismo caso, a 48 años de prisión a Saúl Escobar, ex secretario privado de Bonilla.
El Ministerio Público había solicitado en su contra 64 años de cárcel por 8 delitos de fraude.
Además, absolvió a Mauricio Mora, cuñado de la ex primera dama, de ocho delitos de fraude y lavado de activos por «insuficiencia probatoria».
La acusación contra los otros implicados en el caso fue presentada después de una investigación de la Unidad Especial de la Fiscalía Contra la Corrupción y la Impunidad.
En marzo, las autoridades de Honduras embargaron bienes de la ex primera dama, su cuñado y su ex secretario.
El MP y la Maccih han abierto varias investigaciones y denunciado casos de corrupción que salpican a políticos, empresarios, funcionarios del presente y gobiernos pasados.
Los juicios continúan entre las expectativas de una ciudadanía contraria a repetidos casos de corrupción en un país de 9,3 millones de habitantes.
Una población en la que más del 60% son pobres.
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