Con 45,28% de los votos, Evo Morales deberá ir a segunda vuelta con el opositor Carlos Mesa, quien obtuvo 38,16% de los escrutinios.
En un escenario de polarización, el balotaje quedaría convertido en una suerte de referéndum para Morales sobre sus casi 14 años de gobierno, deslizó Mesa, quien habló de un «triunfo incuestionable» su pase a segunda vuelta.
Por su lado, Morales también reivindicó su victoria en las urnas, sin referirse a una próxima contienda electoral en diciembre de este año.
«El pueblo boliviano se ha impuesto para continuar con el proceso de cambio, política oficialista», dijo el mandatario en la casona presidencial en la Plaza de Armas, en La Paz, donde destacó su nuevo triunfo de votos.
Según la ley boliviana, un candidato gana en primera vuelta si supera 50% más uno de los votos u obtiene 40%, con 10 puntos de diferencia sobre el segundo.
Mesa, en horas previas, afirmó que «a partir de este momento, Bolivia tendrá que escoger entre dos opciones para la Presidencia del país…».
«Esa será una elección en la que se juega el destino de Bolivia», señaló Mesa, tras conocerse 84% de las actas escrutadas, entregadas por la presidente del Tribunal Supremo Electoral, María Eugenia Choque.
«Si hay una segunda vuelta se transforma en referéndum», dijo a la AFP Gaspard Estrada, especialista en América Latina de la Escuela de Ciencias Políticas de París.
Jornada tranquila
A pesar de la polarización, la jornada electoral concluyó en calma en estos reñidos comicios en los que los bolivianos estaban llamados a definir si prolongaban hasta 2025 el mandato de Evo Morales, en el poder desde 2006, u optaban por cambiar a su primer presidente indígena de izquierda.
Mesa había expresado sus temores de fraude. «No confío en la transparencia del proceso» electoral, afirmó después de sufragar, acusando al TSE de ser «un brazo operativo del gobierno».
«Nuestra desconfianza es muy alta». «Necesitamos conseguir que haya cambio. Creo que cualquier partido, por más bueno que sea, al igual que en cualquier sociedad, si se mantiene por mucho tiempo, se corrompe y eso sucede en nuestro caso», dijo a AFP Tania Villarroel López, estudiante de Ingeniería Industrial de 22 años de edad.
Milton Quispe, estudiante de 30 años, dijo que votaría a «Evo porque se ha ocupado de los pobres. Él ha sabido darnos dignidad», apuntó.
Incertidumbre
Morales, que ha ganado todas sus elecciones anteriores sin necesidad de balotaje, venía precedido por sus logros sociales y económicos.
También estuvo en escándalos de corrupción y, por primera vez, no era segura una victoria suya abrumadora en primera vuelta.
La decisión de Morales de postularse para un cuarto mandato fue rechazada en febrero de 2016 en un referéndum.
Sin embargo, un año después, esa decisión fue anulada por una polémica sentencia de la Corte Constitucional.
Tanto los militantes del partido de Morales como de la oposición prometieron salir a la calle en caso de victoria del lado opuesto.
Morales hizo campaña sobre su éxito económico representado en un supuesto alto crecimiento, reducción de la pobreza y récord de reservas internacionales.
Los incendios de este año indignaron a los indígenas y lo acusan de sacrificar la Pachamama para aumentar la producción de carne destinada a China.
Además de los cargos de presidente y vicepresidente, los 7,3 millones de electores eligieron a 166 parlamentarios.