Un empleado de Donald Trump en Florida compareció este lunes ante un tribunal federal de Miami, acusado de ayudar al expresidente estadounidense a esconder pruebas en el caso de mala gestión de documentos confidenciales por el que el magnate fue imputado el mes pasado.
Carlos de Oliveira, el administrador de Mar-a-Lago, donde reside Trump, acudió a la corte por la mañana junto a su abogado, John Irving.
Vestido con un traje azul marino, una camisa celeste y una corbata oscura, Oliveira escuchó atento cómo el juez Edwin G. Torres le leía los cuatro cargos que se le imputan, entre ellos, conspiración para obstruir a la justicia y falso testimonio.
Durante esta breve audiencia, Oliveira, de 56 años de edad, no hizo ninguna declaración sobre su supuesta culpabilidad.
La Fiscalía lo añadió la semana pasada al caso abierto contra Trump y su ayudante personal Waltine Nauta, a los que acusa de intentar evitar que las autoridades recuperasen documentos secretos que el expresidente se llevó al abandonar la Casa Blanca en enero de 2021.
Según el fiscal especial del caso, Jack Smith, Trump, Nauta y Oliveira intentaron presuntamente que otro empleado del magnate, no identificado, borrara los videos de las cámaras de seguridad de Mar-a-Lago para ocultar las maniobras realizadas para ocultar documentos secretos a las autoridades.
De Oliveira, según la acusación, habría dicho a ese tercer empleado de Trump que el jefe quería que se borrara el servidor que contenía los registros de las cámaras de seguridad de un almacén.
Trump y Nauta se habían declarado no culpables de los delitos imputados.
El juez Torres pidió una fianza de 100.000 dólares para Oliveira, exigió la entrega de su pasaporte estadounidense en 48 horas y le prohibió comunicarse con los demás acusados.
El expresidente ha sido inculpado de 31 cargos de retención de información de defensa nacional por supuestamente esconder documentos clasificados en su residencia floridana y negarse a devolverlos a los Archivos Nacionales, poniendo en peligro la seguridad nacional.
Trump se enfrenta a otros problemas legales, incluida una inminente acusación de Smith por los supuestos intentos del expresidente de anular las elecciones presidenciales de 2020 ganadas por el demócrata Joe Biden.
El magnate también se enfrenta a múltiples cargos en un caso de fraude en Nueva York relacionado con pagos a la estrella porno Stormy Daniels para supuestamente comprar su silencio sobre una infidelidad.