Este lunes, tras casi un mes de juicio y cinco días de deliberaciones, el jurado de Nueva York declaró culpable al ex productor de cine Harvey Weinstein de 67 años de edad, por agresión sexual y violación, un veredicto que dejó un momento histórico en relación con el movimiento MeToo.
Después de la deliberación, el juez a cargo del caso ordenó la inmediata encarcelación del magnate hollywoodense, por lo que fue llevado esposado a su celda.
A las pocas horas, Weinstein debió ser trasladado a un hospital de la ciudad por presentar palpitaciones cardíacas.
La sentencia está fijada para el 11 de marzo, pero ya son varias las personas y organizaciones que se han mostrado contentas y esperanzadas por la decisión del tribunal.
Una de las ausentes en la audiencia de Weinstein fue su ex esposa, de quien se divorció en 2018, Georgina Chapman de 43 años de edad. Sin embargo, a nadie sorprende que la diseñadora no participara de la deliberación, ya que desde que en 2017 comenzaran las más de 80 acusaciones de abusos en contra del magnate, la mujer anunció su separación tras 10 años de matrimonio.
«Mi corazón se rompe por todas las mujeres que han sufrido este tremendo dolor por la acciones imperdonables», señaló a la revista People.
Chapman, quien es cofundadora de la conocida marca de moda Marchesa, tiene dos hijos con el acusado, India de 9 años de edad y Dashiell, de 6.
El apoyo, sus hijos
Durante el difícil período, fuentes cercanas a la diseñadora aseguraron que se encontraba molesta de que fuera su marido el causante de los abusos, pero que se centraría en sus pequeños y su negocio.
«Elegí dejar a mi marido. Mi prioridad ahora son mis hijos y pido a la prensa privacidad para estos momentos», señaló tras las acusaciones al magnate.
Tras el acuerdo de divorcio, Weinstein compensó a su ex esposa con la suma de entre 15 a 20 millones de dólares, y Chapman se quedó con la custodia de sus hijos.
La marca Marchesa, la cual fundó en 2004 junto a su socia Keren Craig, era conocido por sus diseños con adornos y géneros románticos que se lucían en las alfombras rojas, vistiendo a conocidas actrices como Kate Hudson, Jennifer Lopez, Sandra Bullock y Blake Lively.
Sin embargo, después de destaparse el caso de su ex marido, la firma sufrió un baja que llegó incluso a la cancelación de su desfile en la Semana de la Moda en Nueva York en 2018.
A pesar del estigma con el que quedó su marca, varias actrices, como Priyanka Chopra y Scarlett Johansson, la apoyaron y utilizaron sus vestidos en alfombras rojas.
Fuera de la vida pública
La primera vez que la diseñadora habló en profundidad sobre el escándalo sexual de Weinstein fue con la revista Vogue en 2018.
«Había una parte de mí que era totalmente ingenua. Tuve momentos de ira, de confusión y de incredulidad. También hay momentos en que solo lloro por mis hijos. ¿Qué van a hacer con sus vidas? ¿Qué les va a decir la gente? Ellos aman a su padre, me pongo en sus lugares y no puedo soportarlo», indicó.
La madre de los dos pequeños reveló que nunca supo del comportamiento de su ex marido, por lo que al enterarse de las acusaciones quedó más impactada aún.
«Tuve lo que yo creía que era un matrimonio feliz. Amaba mi vida. Estaba tan humillada y quebrada», admitió, agregando que no quería salir a las calles al sentir que era «irrespetuoso».
Después del escándalo, Chapman decidió alejarse de las polémicas y se llevó a sus dos hijos a la casa del actor, y amigo muy cercano a ella, David Oyelowo y su esposa en Los Ángeles.
Weinstein, su peor pesadilla
«La catástrofe estaba pasando en tiempo real alrededor del mundo, literalmente su peor pesadilla en términos de matrimonio, del futuro de sus hijos y el de su negocio. Nada de eso había sido por su culpa», indicó Oyelowo en esos momentos a People.
La última vez que se vio a Chapman en la vida pública fue en mayo de 2019, cuando la diseñadora volvió a estar presente en la Met Gala acompañando a la actriz Constance Wu, quien llevó uno de sus vestidos Marchesa. Su cuenta de Instagram sigue funcionando, pero no ha publicado imágenes desde octubre de 2017.