Dos policías aplicaron descargas eléctricas en repetidas ocasiones y durante tiempo prolongado al abogado Javier Ordóñez Bermúdez, a pesar de que él les imploró que pararan los choques.
«Ya por favor, ya, no más. Por favor, no». Esas fueron las palabras con las que Ordóñez suplicó a la policía de Bogotá, en Colombia, que dejaran de darle choques eléctricos con el táser. Pero un video registra que al menos durante más de dos minutos los uniformados siguieron electrocutándolo.
Ordóñez, de 46 años de edad, murió después de que la policía se lo llevó al Comando de Acción Inmediata (CAI), un puesto de esa fuerza pública, y luego lo condujeron a un centro asistencial.
Todo comenzó este miércoles en la madrugada en el oeste de la capital colombiana. Uno de los amigos de Ordóñez le dijo al medio local Caracol Televisión que estaban tomando licor en la calle, algo que las autoridades nacionales prohibieron como parte de las medidas para controlar la pandemia del covid-19.
En esos momentos, llegó la policía y uno de los agentes advirtió a Ordóñez que esta vez «no se salvaba», en referencia a que lo había visto en otras ocasiones ingiriendo alcohol. El abogado replicó que lo multara.
Múltiples descargas eléctricas
Lo que ocurrió a continuación se conoció públicamente por los videos que circularon en redes sociales al otro día. Las imágenes evidencian cómo por lo menos dos agentes de policía tuvieron en el piso a Ordóñez mientras le propinaban descargas eléctricas en diferentes partes del cuerpo de manera prolongada, a pesar de que él mismo y las personas que grababan los hechos les gritaron a los agentes que dejaran de accionar el táser.
«Les está diciendo que por favor paren; los estamos grabando», dijo un hombre a los policías. Ante la negativa de estos a detener su agresión, el testigo insistió: «Hace rato dijo por favor, déjenlo ya tranquilo». A pesar de las peticiones de los presentes, en un momento del video se ve cómo uno de los uniformados intenta impedir que siguieran grabando la escena.
El mismo testigo que habló con medios locales aseguró que después del incidente los policías llevaron a Ordóñez a un CAI,pero nadie tiene certeza aún de qué ocurrió allí. Según los familiares de la víctima, los agentes lo habrían golpeado y habrían continuado los abusos en su contra. Finalmente a Ordóñez lo trasladaron a un centro de salud, donde murió pocos minutos después.
Las autoridades aseguran que investigarán los hechos
Este reciente hecho de brutalidad policial despertó el rechazo de las autoridades en Colombia. El ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, quien es uno de los jefes de la Fuerza Pública en el país, manifestó: «Los dos agentes son objeto de investigación disciplinaria y penal y la institución dará toda la colaboración que requiera la autoridad competente».
La Defensoría del Pueblo, el organismo oficial dedicado a la vigilancia de los derechos humanos, también manifestó su rechazo a las «acciones en las que predomine el uso excesivo de la fuerza». Le pidió a la policía que esclarezca los hechos y anunció que «verificará cualquier situación que pueda violar los derechos humanos».
La policía sostiene que suspendió a los uniformados involucrados en el hecho y en medios locales el general Gustavo Moreno, subdirector de la entidad, reconoció que «indudablemente hubo un exceso de autoridad que se está investigando tanto disciplinaria como penalmente».
Otra de las autoridades en pronunciarse fue la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, que también funge como jefa de la policía en la capital colombiana. Aseguró que, por un lado, le garantizarán a los familiares de la víctima «la asistencia psicosocial y judicial para que haya una condena ejemplar de los responsables directos de este caso».
Además, la alcaldesa espera una condena ejemplar «para que haya una reforma estructural al interior de la policía que prevenga y sancione el abuso policial».
Con información de EFE y France 24.