La diferencia entre los candidatos Luis Lacalle Pou y Daniel Martínez al cierre del escrutinio de la Corte Electoral es tan ajustada que la definición dependerá de los votos observados. Esto se conocerá entre el “jueves o viernes”, de acuerdo a lo que dijo el presidente de la Corte Electoral, José Arocena, a El País. Esto se debe a que la cantidad de votos observados es similar a la diferencia entre los candidatos, agregó Arocena.
Si bien las encuestadoras en su último relevamiento daban una victoria del candidato nacionalista, en la noche de este domingo se vieron sorprendidas por una votación más ajustada de la esperada, al punto que solo dos de ellas –Opción y Cifra- aventuraron un ganador a las 20:30, cuando se levantó la veda. En tanto, Factum dio minutos más tarde un escenario de empate técnico, mientras que Equipos no divulgó resultados.
Para las 10:50 hora local y con el 96.52% escrutado, Lacalle Pou tenía 1.129.274 votos (48.80%), mientras Martínez contaba con 1.097.068 votos (47.41%).
Cuál fue la reacción en las sedes
Militantes del Partido Nacional y del Frente Amplio aguardaban afuera de las sedes utilizadas como búnker de los candidatos presidenciales entre la cautela y la esperanza.
En la sede del Frente Amplio ubicada en el hotel Crystal Tower el clima es de alegría y sienten una victoria la proyección de las encuestadoras, por entender que se habría achicado la brecha que se daba en la previa del balotaje. Algunos dirigentes sostienen que pueden llegar a ganar la elección con la suma de los votos observados.
En tanto en la sede de Lacalle Pou, sobre Bulevar Artigas, el clima de espera es de incertidumbre ante la diferencia ajustada que no habilita a nombrar un ganador. Hay que esperar es la frase más repetida.
Los militantes del Partido Nacional solo gritan y festejan cuando ven que están saliendo en la pantalla grande que está ubicada en las afueras del búnker. Con los primeros resultados hubo festejo y después absolutamente nada más.
En la sede de Cabildo Abierto hay un profundo silencio y caras de preocupación. “Tenemos que ganar con un gol de Suárez en la hora”, dijo un dirigente. Otra dirigente planteó: “A esta altura, si ganamos por medio punto igual sirve”. Otro militante le echa la culpa a los votos del exterior.