Cientos de migrantes que han ingresado de manera irregular en las últimas semanas, desde Centro y Suramérica, a la ciudad mexicana de Tapachula, fronteriza con Guatemala, buscan arrancar el domingo una caravana que intentará avanzar a la frontera norte de México y luego a Estados Unidos.
Este sábado, en el parque central de Tapachula, donde se reúnen migrantes de Venezuela, Perú, Ecuador, Colombia y Haití, los organizadores colocaron dos cartulinas en las que anunciaron el nuevo movimiento masivo de personas, quienes buscan avanzar sin permisos migratorios.
Uno de los organizadores dijo a EFE que esperan reunir a unas 1.000 o 1.500 personas y que partirán por la mañana del domingo.
Los migrantes han cumplido una estancia previa en Tapachula, donde han llevado a cabo trámites migratorios ante la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados y ante el Instituto Nacional de Migración para solicitar visas por razones humanitaria, pero buscarán salir de la ciudad este domingo.
Venezolanos en el grupo que conformará caravana
El venezolano Daniel Murillo, originario de Maracaibo, remarcó que por más que quieran quedarse en México, «la situación económica en este país es crítica». Su idea es seguir hacia Estados Unidos.
«Ninguno de los que estamos aquí nos gusta las condiciones en las que estamos, estamos durmiendo en la calle y si dejamos nuestro país es para poder tener una mejor calidad de vida, pero la estamos pasando mal, lo único que nosotros pedimos es libre tránsito», dijo a EFE.
«Nosotros nos hemos quedado acá unos 20 días, pero es porque necesitamos dinero, necesitamos trabajar y seguir avanzando, nuestra meta es seguir y pasar por México, sin ofender a nadie», añadió.
En tanto, Wendy Jacinta, migrante de Ecuador, señaló a EFE que en Tapachula existe un proceso migratorio, pero este «dura mucho tiempo y nadie va esperar un mes durmiendo con cartones en los parques, en las calles ni a sufrir el maltrato de las autoridades por ser migrante».
Los migrantes lanzaron un llamado de auxilio a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y al gobierno del estado de Chiapas para que les ayuden con el tema de los niños y adolescentes que permanecen en situación de calle.
En las últimas semanas, en el parque central de Tapachula se mantienen cientos de migrantes haitianos que se han dedicado a la venta informal de productos, lo cual les permite subsistir, mientras esperan sus documentos.
De acuerdo con la Comar, los migrantes haitianos ocupan el tercer lugar en cuanto a petición de solicitudes de asilo en México, con 13.493 solicitudes.
Cambio de divisas
En tanto, otros grupos de migrantes colombianos, venezolanos y de países de África, se han instalado de manera informal en la plaza principal de Tapachula para intercambiar divisas, dólares, quetzales, euros y hasta lempiras por pesos mexicanos, lo que les permite sobrevivir mientras permanecen en esta región fronteriza.
«¡Cambio, cambio, cambio!», grita un migrante haitiano en el lugar, donde algunos de sus compatriotas y otros extranjeros acuden a cambiar dinero de sus países por moneda mexicana.
La región vive un flujo migratorio récord hacia Estados Unidos, cuya Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés) detuvo en el año fiscal de 2022 un número inédito de más de 2,76 millones de indocumentados, una cifra que incluye incrementos sustanciales en las capturas de migrantes cubanos y venezolanos.