China consideró este lunes que la expulsión de dos diplomáticos chinos por parte de Estados Unidos fue un error.
Geng Shuang, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, denunció acusaciones totalmente contrarias a los hechos y pidió que Estados Unidos repare este suceso, que consideró como un error.
El incidente se produce justo cuando las dos potencias económicas mundiales acaban de enterrar el hacha de guerra comercial tras lograr un entendimiento.
De acuerdo con el diario New York Times, estas expulsiones «secretas» de los dos diplomáticos chinos serían las primeras en 30 años.
Las mismas se produjeron cuando los dos funcionarios habrían intentado infiltrarse en una base militar en Virginia, una instalación sensible en la que hay fuerzas de operaciones especiales.
Se cree que al menos uno de los diplomáticos era un oficial de Inteligencia que operaba encubierto, señaló el Times.
El diario agregó que los diplomáticos, acompañados por sus esposas, condujeron hasta el punto de control en la entrada de la base, cuando un guardia de seguridad les indicó que dieran la vuelta y se marcharan porque no tenían ningún tipo de autorización.
Pero los funcionarios chinos continuaron su camino. El personal de seguridad los persiguió hasta que camiones de bomberos les cortaron el paso.
Los funcionarios dijeron que no hablaban bien inglés, por lo que no habían entendido las instrucciones del guardia, reseñó el New York Times.
El portavoz de China explicó este lunes que Pekín había protestado oficialmente ante Washington.
China y Estados Unidos mantienen sus diferencias en numerosos ámbitos. Una de ellas es la situación de Hong Kong, la política china frente a la minoría uigur y el espionaje industrial.