El canciller chileno, Alberto van Klaveren, dijo este jueves que su país seguirá defendiendo firmemente la preservación de la Antártida, luego de que se conociera que Rusia habría descubierto vastas reservas de petróleo y gas en una zona del territorio blanco reclamada por Chile, Argentina y Reino Unido.
«Ocasionalmente surgen noticias no confirmadas sobre reservas minerales y de hidrocarburos en la Antártica. El régimen antártico prohíbe su prospección y explotación. Y Chile, al igual que otros países antárticos, seguirá defendiendo firmemente la preservación de la Antártica», indicó el ministro en su cuenta de X.
El diario británico The Daily Telegraph informó esta semana que parlamentarios británicos tendrían temores de que Moscú vaya a intentar extraer petróleo de una parte de ese territorio austral.
El temor se basa en que hace cuatro años la agencia geológica rusa Rosgeo validó los estudios del buque ruso de investigación polar Alexander Karpinsky sobre la disponibilidad de unos 70.000 millones de toneladas de petróleo y gas enterrados debajo de la plataforma antártica.
Las reservas contendrían alrededor de 511.000 millones de barriles de petróleo, lo que equivale a alrededor de 10 veces la producción del mar del Norte en los últimos 50 años, de acuerdo con el periódico conservador.
La Antártida se rige por el llamado Tratado Antártico, firmado inicialmente por 12 países el primero de diciembre de 1959, que establece que ningún país es propietario del territorio y designa la región como un continente dedicado a la paz y la ciencia, lo que significa que todos los desarrollos petroleros están prohibidos.
El tratado tiene vigencia indefinida y no ha sufrido enmiendas, pero a partir del año 2048 cualquiera de las partes consultivas podrá solicitar su revisión, con la aprobación por mayoría relativa.
Si bien la Antártida no está gobernada por nadie, países como Reino Unido, Argentina, Chile, Australia o Nueva Zelanda han reclamado históricamente partes de su territorio.
En 1940, a través del Decreto N° 1747 promulgado por el presidente chileno Pedro Aguirre Cerda, se fijaron los límites del territorio antártico chileno y siete años después se inauguró la primera base antártica chilena, la actual Base Naval Capitán Arturo Prat.
En la actualidad, Chile tiene al menos 10 bases, de las cuales cinco están gestionadas por el Instituto Antártico Chileno (Inach) y el resto por las Fuerzas Armadas chilenas.