Chile decretó alerta sanitaria tras brote del virus respiratorio sincicial (VRS) luego del fallecimiento de seis lactantes. Las muertes se produjeron en el hospital de Santiago, según informa CNN.
Para este virus no hay vacuna disponible, indica el medio, y prolifera debido a las bajas temperaturas. El brote es catalogado por las autoridades del país como el más grande de los últimos años.
«Estamos en una situación compleja por los virus respiratorios. La complejización de camas es una parte muy relevante para tener los recursos para los niños que tienen un curso más grave». Así dijo este miércoles la ministra de Salud, Ximena Aguilera, durante la inspección a un hospital en Santiago.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) aprobó a comienzos de mayo la primera vacuna contra este virus. Pero solo para personas mayores de 60 años.
En EE UU el virus causa entre 60.000 y 120.000 hospitalizaciones al año. También entre 6.000 y 10.000 muertes entre personas de 65 años o mayores, según la FDA.
Según el último reporte del Ministerio de Salud de Chile, hasta este miércoles había un 92% de ocupación de camas críticas en los hospitales. Esto tanto en el sistema público como en el privado.
También un total de 235 traslados pediátricos desde el inicio de la campaña de invierno. Para los próximos días, los pronósticos tampoco son alentadores.
Condiciones idóneas
La baja de las temperaturas y otros virus, como la influenza, podrían contribuir a congestionar aún más la red hospitalaria.
«El virus sincicial causa una enfermedad grave, genera una destrucción del tejido de los pulmones y una insuficiencia respiratoria en los niños. Especialmente en los menores de un año». Así explicó el jefe del Departamento de Epidemiología del Ministerio de Salud, Christian García.
«Durante la pandemia se ha generado una gran población susceptible. Esto explica, en parte, la gran cantidad de circulación y de casos detectados por nuestro sistema sanitario», añadió.
El gobierno chileno anunció que a partir de este jueves regresó el uso obligatorio de mascarillas. Esta medida es para profesores y niños mayores de 5 años.
Para uso en espacios cerrados de establecimientos escolares hasta el término de la alerta sanitaria fijada para el 31 de agosto.
«El virus se transmite cuando una persona infectada tose y no se cubre adecuadamente. Así las gotitas del virus llegan a otras personas y pueden llegar y entrar por la boca, las mucosas, los ojos», explicaron las autoridades.
“También por contacto de superficies donde hayan caído estas gotitas, como una mesa, pasamanos, manillas», añadió García.
La medida podría extenderse
Agregó que, debido a la facilidad con la que puede propagarse el virus, no se ha descartado la posibilidad de extender esta medida a otros espacios cerrados, como el transporte público.
Los casos de lactantes fallecidos en Chile han resonado en la ciudadanía por la poca celeridad a la hora de gestionar los traslados a camas pediátricas.
Esta situación está siendo investigada por las autoridades y ya costó la salida del exsubsecretario de redes asistenciales, Fernando Araos.