La emblemática Torre Eiffel se encuentra este lunes cerrada al público por una huelga convocada por los trabajadores de la empresa concesionaria, y existe la posibilidad de que la situación se prolongue en los próximos días.
La Sociedad de Explotación de la Torre Eiffel anunció en su página web que, debido a una convocatoria de huelga por parte de una parte del personal, la apertura del monumento se verá perturbada.
La SETE aconsejó a los visitantes que consulten su sitio digital antes de planificar su visita y también que consideren posponerla.
Los sindicatos detrás de la protesta, la Confederación General del Trabajo y la Fuerza Obrera, están exigiendo una mejor gestión financiera del monumento por parte del Ayuntamiento de París, que posee 99% del capital de la sociedad.
Esta misma razón ya había provocado una huelga el pasado 27 de diciembre.
Las centrales sindicales argumentan que el presupuesto para las obras es insuficiente, especialmente considerando las necesidades de pintura periódica del monumento. Y que las estimaciones de ingresos previstos son exageradas.
Esas estimaciones se basan en una hipótesis de 7.4 millones de visitantes anuales, una cifra que nunca se ha alcanzado.
Un representante sindical, en declaraciones a la emisora France Info, expresó su disgusto por el hecho de que el Ayuntamiento esté aumentando el canon que recibe de la SETE de 16 millones de euros a 50 millones anuales, especialmente cuando la concesionaria está saliendo de la crisis de la covid-19 con una deuda de aproximadamente 100 millones de euros debido a la disminución del turismo.
Esta mañana se llevó a cabo una asamblea general en la que se espera una decisión sobre la posible continuación de la protesta.