El gobierno de Arabia Saudí rechazó categóricamente, por medio del Ministerio de Exteriores, el informe publicado por los servicios de inteligencia de Estados Unidos; que apunta que el príncipe heredero Mohamed bin Salmán aprobó la operación para asesinar al periodista Jamal Khashoggi en 2018.
«El gobierno del reino rechaza categóricamente lo que se afirma en el informe sobre el asesinato del ciudadano Jamal Khashoggi. Qué Dios se apiade de él», señala un comunicado del departamento de Exteriores saudita, difundido por la agencia de noticias estatal, SPA.
Según el Ministerio de Exteriores las conclusiones del informe publicado este viernes son «injustificadas e incorrectas y no pueden ser aceptadas de ninguna manera».
«El Reino rechaza cualquier cuestión que pueda afectar a su liderazgo, soberanía e independencia de su Poder Judicial», dice la nota del Ministerio.
Asimismo, señaló que la investigación que se realizó en ese país concluyó: «Este crimen atroz constituyó una flagrante violación de las leyes y valores del reino y fue cometida por un grupo que violó todas las regulaciones y las autoridades ya tomaron todos los procedimientos judiciales necesarios».
Sentencias en Arabia Saudita
El departamento de Exteriores recordó que ya se emitieron sentencias judiciales definitivas contra los supuestos perpetradores del crimen. Aseguró que la familia del periodista y disidente Khashoggi, asesinado en 2018 en la embajada de su país en Estambul, acogió los veredictos «con satisfacción».
En septiembre de 2020, la justicia saudita dictó sentencias definitivas contra los ocho acusados del crimen; conmutando las penas para los condenados a muerte y cerrando un caso que minó la imagen internacional del país y, sobre todo, del príncipe heredero Mohamed bin Salman.
En la nota, Exteriores recordó: «La asociación entre Arabia Saudí y Estados Unidos es fuerte y sólida, y así se ha sostenido durante las ocho últimas décadas».
Agregó que en las relaciones diplomática ha prevalecido «el respeto mutuo”.
Informe de EE UU
Este viernes, la Oficina de la Directora de Inteligencia Nacional de Estados Unidos hizo público un documento en el que dice que el príncipe heredero Mohamed Bin Salmán «aprobó la operación en Estambul, Turquía, para capturar o matar al periodista saudita Jamal Khashoggi».
El informe agrega que esta evaluación se basa en el control por parte de Bin Salman del proceso en la toma de decisiones en el reino; así como en la implicación directa de asesores y miembros de la seguridad del príncipe heredero en el asesinato, y en su apoyo al uso de medidas violentas para acallar a disidentes en el extranjero.
También incide en que durante la época en que el periodista fue asesinado Bin Salmán probablemente fomentó un ambiente en el que sus asistentes temían fracasar en los cometidos que se les encargaba, ante la posibilidad de ser despedidos o arrestados.
Jamal Khashoggi
Khashoggi, de 59 años de edad, residente en Estados Unidos y colaborador del diario The Washington Post, era un gran crítico de la familia real saudita.
El 2 de octubre de 2018 entró en el consulado saudita en Estambul, del que nunca salió. Fue asesinado por un grupo de personas, que mutilaron su cuerpo, el cual que nunca ha sido recuperado.