La caravana de migrantes, que formaron ciudadanos de 24 nacionalidades, abandonó la ciudad de Tapachula la mañana de este domingo que se festeja la Navidad.
El defensor de derechos humanos de la organización Dignificación Humana, Luis Rey García Villagrán, encabeza el contingente que lo integran la mayoría familias con niños en edad de lactancia, mujeres embarazadas y personas con discapacidad.
Ante de iniciar la caminata, García Villagrán explicó que ante la política de puertas cerradas del Instituto Nacional de Migración (INM) y que la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) no otorga tarjetas a los migrantes, han decidido caminar por la carretera Costera para tratar de llegar a la frontera con Estados Unidos a pesar de la crisis que se presenta en esos puntos fronterizos.
Avanza la caravana de migrantes
“Hay un tapón y un nudo humano que está reflejado en este grupo de personas; le decimos al estado mexicano que no nos deja otra opción que caminar hasta que el INM otorgue los permisos migratorios”, aseveró.
“Hoy caminamos los más pobres, de los más pobres, de los más pobres, lo que estamos en la cúspide de la necesidad, los que no tenemos para pagar visas, coyote-pollero”.
Tras una oración, el contingente encabezado por un migrante haitiano que carga una cruz de madera pintada de blanco y un migrante brasileño que portaba una bandera de México y una biblia, iniciaron su caminata con los primeros rayos del sol.
El activista dijo a los migrantes que el objetivo es cruzar el primer retén migratorio que se ubica en el ejido Viva México a escasos ocho kilómetros de esta ciudad y, posteriormente, llegar al poblado Álvaro Obregón para descansar.