El canciller de Perú, Javier González-Olaechea, definió este viernes como «infundada» la posición de su homólogo venezolano, Yván Gil, quien esta semana afirmó que la banda criminal Tren de Aragua no existe.
«No cabe dar respuesta a declaraciones infundadas sobre la delincuencia organizada transnacional. Perú reafirma su sólido compromiso en la lucha contra este flagelo», expresó el canciller peruano, al comentar en la red social X una noticia del canal estatal TV Perú que recoge las declaraciones de Gil.
Añadió que así lo evidencia y confirma el Plan de Acción Resolutivo de la Comunidad Andina (CAN).
Este lunes, Gil aseguró en un encuentro en Cúcuta (Colombia) con su homólogo colombiano, Luis Gilberto Murillo, que «el Tren de Aragua es una ficción creada por la mediática internacional para tratar de crear una etiqueta inexistente, como lo hicieron en su momento con el Cartel de los Soles».
«Hemos visto, por ejemplo, cómo ridículamente aparecen videos incluso de gente que dice ‘somos del Tren de Aragua’, con acento peruano, con acento chileno», añadió.
Estas declaraciones generaron también el rechazo del presidente de Chile, Gabriel Boric, quien llamó este jueves a consultas al embajador chileno en Venezuela, Jaime Gazmuri, precisamente en protesta por las palabras de Gil.
«Me parece inaceptable que autoridades de otros países, pero particularmente de Venezuela, realicen declaraciones que ponen en duda la existencia de organizaciones criminales como el Tren de Aragua», afirmó Boric.
El canciller chileno, Alberto van Klaveren, que aseguró que «es inaceptable el negacionismo respecto a los impactos del crimen transnacional organizado en Chile y la región.
De la misma forma reaccionó la ministra de Interior del país, Carolina Tohá, quien dijo que es un «insulto» que Venezuela niegue la existencia de dicha banda criminal.
«Es un insulto, no al gobierno de Chile sino al pueblo de Chile y a los pueblos de Latinoamérica. Inaceptable», indicó Tohá en declaraciones a la prensa.
La ministra lamentó además que Venezuela «dice ser un país bolivariano» mientras «Chile, Perú, Ecuador, Colombia y otros pueblos latinoamericanos sufren fuertemente el flagelo de esta banda criminal».
El Tren de Aragua es una organización criminal transnacional originaria de Venezuela, considerada la banda más poderosa del país y dedicada a ejecutar asesinatos, extorsiones, secuestros, tráfico y trata de personas, entre otros delitos.
Desde 2018, el grupo se expandió rápidamente por el continente americano a lo largo de la ruta que recorren los migrantes venezolanos y se sabe que opera en ciudades de Colombia, Perú, Chile y otros países.