El presidente estadounidense, Joe Biden, celebró este martes su victoria en las primarias de Míchigan a través de un comunicado en el que no hizo referencia alguna a la guerra de Gaza, pese a que miles de ciudadanos mostraron en las urnas su rechazo al papel de EE UU en el conflicto.
«Quiero agradecer a todos los habitantes de Míchigan que hicieron oír su voz hoy. Ejercer el derecho al voto y participar en nuestra democracia es lo que hace grande a Estados Unidos», apuntó el presidente, que ganó con 80,1% de los votos, con 31% escrutado.
Una victoria abultada que, sin embargo, no es plena, ya que 14,1% de las personas que acudieron a las urnas marcó la casilla uncommitted siguiendo la petición de dos organizaciones, en protesta por el apoyo que EE UU está brindando a Israel en su ofensiva militar en la Franja de Gaza.
«Hace cuatro años, fue la coalición diversa de Míchigan la que se unió para rechazar el extremismo MAGA de Donald Trump y nos envió a Kamala y a mí a la Casa Blanca», afirmó Biden en un texto en el que relató varios de los avances en el estado durante estos años, pero no hizo referencia alguna al conflicto.
La clave principal de esta elección primaria era medir cómo la guerra de Gaza puede debilitar a Biden de cara a la contienda electoral de las generales de noviembre.
Dos organizaciones que representan el voto árabe y musulmán y a los demócratas más progresistas, Listen to Michigan y Our Revolution, respectivamente, solicitaron marcar la casilla uncommitted en protesta.
El objetivo de estas organizaciones era que al menos 10% de los votos emitidos en la primaria demócrata fuera en blanco, en un intento para que la administración Biden cambie de rumbo en su política hacia Medio Oriente y exija a Israel un alto el fuego inmediato e incondicional.
Y, aunque con el recuento sin finalizar, parece que han logrado su objetivo en un estado clave para las presidenciales ya que es uno de los conocidos como estados bisagra, aquellos que por el estrecho margen pueden inclinarse tanto del lado demócrata como del republicano.
En las elecciones de 2020 Míchigan, que cuenta con condados con gran población árabe, fue clave para la victoria de Biden.
El estado determina 117 delegados para la convención demócrata y el voto «no comprometido», aunque no puede descarrilar la nominación del actual presidente, puede servir para airear el descontento de los votantes jóvenes y de zonas con gran porcentaje de población árabe y musulmana durante la convención del partido, que se celebrará en agosto, y en la que Biden será nombrado oficialmente.