El papa emérito Benedicto XVI celebró este lunes en el Vaticano su cumpleaños 90 con una fiesta en la que no faltaron sus más cercanos colaboradores, los trajes tradicionales de su Baviera natal e incluso degustó la cerveza típica alemana.
La fundación vaticana que lleva su nombre difundió en su perfil de Facebook imágenes de la celebración, que tuvo lugar a las puertas del monasterio Mater Ecclesiae del Vaticano, donde reside desde que renunciara al pontificado, hace cuatro años.
En las fotografías puede verse al papa emérito recibiendo una cesta con productos típicos alemanes, como los «bretzel», así como a un grupo de personas que le saludan ataviados con trajes bávaros en una soleada explanada de los jardines vaticanos.
En la celebración tampoco faltaron las jarras de cerveza, que degustaron tanto Benedicto XVI como su hermano, Georg Ratzinger, de 93 años, y el secretario personal del pontífice alemán y prefecto de la Casa Pontificia, Georg Gänswein, entre otros.
Ratzinger cumplió noventa años ayer, el 16 de abril, pero decidieron celebrar esta fecha este lunes, con el objetivo de que no coincidiera con los ritos del Domingo de Resurrección.
Benedicto XVI anunció su histórica renuncia el 11 de febrero de 2013 y se hizo efectiva el día 28 del mismo mes, lo que dio paso al cónclave que derivó el 13 de marzo sucesivo en la elección de un nuevo papa, Francisco, el primero latinoamericano de la historia.
Desde entonces Ratzinger, que recibió el título de papa emérito y sigue vistiendo de blanco, continúa guardando silencio y «oculto al mundo» tal y como prometió cuando anunció su renuncia al ministerio petrino para no interferir en el gobierno de la Iglesia.
De cara a la llegada de su cumpleaños, uno de los primeros en felicitarle fue el propio papa Francisco, el pasado miércoles, que acudió al monasterio Mater Ecclesiae también para el tradicional augurio de Buena Pascua.