A una semana de la asunción de Joe Biden como presidente de Estados Unidos, Barack Obama reflexionó sobre el legado de Donald Trump y los desafíos que debe enfrentar el nuevo gobierno norteamericano.
Al conversar con el programa A vivir, de la cadena Ser, el expresidente dijo que «la guerra a veces es necesaria».
Agregó: «No me arrepiento, por ejemplo, de haber dado la orden a la operación que resultó en la muerte de Osama Ben Laden, porque él estaba planificando asesinar a gente inocente, algo que ya había hecho antes».
El premio Nobel explicó que lo mismo sucede con las redes terroristas. Y si bien consideró que «la principal tarea del líder de cualquier país es proteger a su pueblo», aclaró que «hay un peligro en sentirse cómodo» ante esas situaciones, porque «incluso las guerras necesarias conllevan cosas terribles».
«Eso es algo que pesa en mi consciencia, y así debe ser. Yo desconfiaría de un líder que no reflexionara sobre eso o que no le afectara».
Durante la entrevista, Obama también analizó el rol del Estado. «Hay una cierta ideología que sugiere que el sector público y la inversión pública son una pérdida de tiempo, algo corrupto e inútil, mientras que el capitalismo, los mercados y las empresas son lo único que importa, pero resulta que tener un gobierno eficaz, con gente seria que sepa lo que está haciendo, marca la diferencia. Espero que la gente ayude a que aprendamos esa lección».
Contó que, a la hora de diseñar sus políticas, tuvo en cuenta sus propias experiencias de vida. «El hecho de haber visto a mi madre con cáncer, preocupándose por si podía o no pagar las facturas, me hizo más consciente del miedo y la inseguridad que sufre la gente que no tiene cobertura médica». Y añadió que lo mismo le sucedió con la educación.
«Yo no nací rico. Tuve que pedir créditos para ir a la universidad y eso me hizo más empático con los jóvenes que quieren ser alguien en la vida, pero no tienen los recursos».
Habló de Trump y de Michelle Obama
El exmandatario evaluó la gestión que hizo Donald Trump respecto del coronavirus. Para Obama, cualquier presidente hubiera tenido dificultados para lidiar con esta pandemia y era inevitable que hubieran víctimas. Pero, sostiene, el manejo del republicano fue «descorazonador».
«No hay duda alguna de que, si el gobierno de Estados Unidos hubiera sido más responsable y eficiente, se hubieran salvado vidas y la enfermedad no hubiera tenido un impacto tan devastador».
Durante la entrevista, Obama habló también de su familia, de la alegría que le brindan sus hijas «incluso en los peores días» y de su esposa, Michelle. Según contó, siente que allí está su «armadura» y lo que le permitía «volver a la batalla».
«Todo eso se lo debo a Michelle. Ella sabe que lo que mueve a la gente es el corazón, y no la cabeza. Creo que esa es una de las razones por las que ella misma fue tan popular: porque la gente intuía que tenía ese corazón».