El ministerio de Salud libanés elevó este miércoles al menos a 182 el número de muertos por la explosión que se produjo el 4 de agosto en el puerto de Beirut. El suceso ha dejado también más de 6.000 personas heridas.
Una fuente del departamento de Salud precisó que el balance aumentó a 182, aunque mantiene la cifra de heridos en «más de 6.000». Mientras el Ejército libanés sitúa en 30 las personas que siguen desaparecidas.
El 4 de agosto se registró una explosión en el puerto en Beirut por una carga de 2.750 toneladas de nitrato de amonio almacenadas en un galpón, generando una onda expansiva que afectó a toda la capital libanesa.
Este sábado, el presidente libanés pidió a los afectados por la explosión que se aferren a sus tierras, hogares y la identidad de Beirut.
Asimismo, recordó que el proceso de compensación para los afectados será rápido, eficiente y justo.
El presidente Michael Aoun indicó que las pérdidas producidas por la catástrofe rondan los 15.000 millones de dólares.
Más de la mitad de los centros de salud públicos y privados de la capital libanesa se han visto afectados. Esto ha dificultado no solo la atención de los heridos por la deflagración, sino también el tratamiento de enfermos de covid-19, que ha vuelto a repuntar en medio de la tragedia.
Tanto las agencias de la ONU como organizaciones humanitarias y la comunidad internacional están apoyando al Líbano con el envío de suministros y ayuda médica adicional.