El gobierno británico presentó un plan de defensa que incluye la ampliación de su arsenal de armas nucleares por primera vez desde la caída de la Unión Soviética en 1991. También señaló a Rusia y China como principales “amenazas” para la seguridad. Y ratificó que mantiene una “presencia militar permanente” en las Islas Malvinas. Esto provocó un nuevo choque diplomático con Argentina.
A través de un comunicado, la Cancillería argentina lamentó la decisión del gobierno de Boris Johnson y sostuvo que “debe escuchar a la comunidad internacional”.
“Frente a la presentación realizada hoy por el primer ministro británico Boris Johnson en la Cámara de los Comunes, en la que expuso una Revisión Integrada de Seguridad, Defensa, Desarrollo y Política Exterior, la República Argentina sostiene una vez más que el Reino Unido debe escuchar a la comunidad internacional que promueve el fin del colonialismo en el mundo”. Señala el comunicado emitido esta tarde.
Países de la región
Agregó: “Las consideraciones postuladas por el primer ministro Johnson reiteran la tradicional mirada colonialista del Reino Unido sobre las Islas Malvinas. Y también el conjunto de posesiones británicas alrededor del mundo. Para la Argentina no expresan novedad respecto de la política colonial británica”.
“La Argentina denuncia en forma permanente que uno de los objetivos principales del Reino Unido es sostener una base militar en Malvinas. Es una circunstancia que los países del Atlántico Sur de América Latina y África que conforman la Zona de Paz del Atlántico Sur (ZPCAS) han planteado como una amenaza para toda la región”, recordó la Cancillería.
Preocupación de Argentina
“Esta situación ocurre además en un contexto de profunda preocupación por parte de quienes creen que el Brexit ha debilitado la posición británica en el mundo y en particular afectados por la exclusión de los territorios de ultramar como Malvinas, Sándwich del Sur y Georgias del Sur y de los espacios marítimos circundantes del tratado de libre comercio con la UE”.