El juez Brian M. Cogan, encargado del caso contra Ismael «el Mayo» Zambada en una corte federal de Nueva York, autorizó hoy una petición de la Fiscalía para aplazar un día -del jueves de esta semana al viernes- la audiencia contra el cofundador del Cartel de Sinaloa debido a un «conflicto de programación».
La vista contra el capo mexicano, que estaba prevista inicialmente para el 31 de octubre y fue adelantada después al jueves 17 de octubre, pasa ahora a estar fijada para este viernes 18 de octubre a las 11:00 am en horario de la Costa Este estadounidense.
De mantenerse esta fecha, la audiencia contra el Mayo, que podría ser la primera de un hipotético juicio en el que no se descarta incluso pena de muerte, se produciría dos días después de que el exsecretario de Seguridad Pública mexicano Genaro García Luna conozca su sentencia en ese mismo tribunal.
El encargado de dictar sentencia contra García Luna será el juez Cogan, quien ya condenó a cadena perpetua a Joaquín «el Chapo» Guzmán en 2019. Encabezará el juicio contra el Mayo Zambada este viernes en el tribunal federal del Distrito Este de Nueva York (con sede en Brooklyn).
El Mayo podría enfrentar la mayor pena
El Mayo se declaró no culpable el 13 de septiembre en esa corte de 17 cargos, entre los que se incluyen conspiración para asesinato, narcotráfico, pertenencia a empresa criminal y posesión de armas.
Aunque la ley en Nueva York establece que la audiencia debía comenzar dentro de los 60 días posteriores a la primera comparecencia del acusado, el juez de instrucción James R. Cho hizo una excepción en este caso debido a su gran complejidad y a la abundancia de documentos para la investigación.
«El señor Zambada ha sido, y puede que siga siendo, uno de los mayores y más peligrosos narcotraficantes del mundo que con el comercio de estupefacientes y con la violencia de su empresa criminal participó en sobornos, tortura y asesinato de civiles y miembros de carteles rivales», aseguró Francisco Navarro, fiscal de la corte federal de Brooklyn, el 13 de septiembre.
Zambada podría enfrentarse incluso a pena de muerte -pese a ser abolida en el estado de Nueva York en 2004- si el gobierno federal considera que con su papel crucial en el Cartel de Sinaloa, actor principal en la crisis de sobredosis por fentanilo en EE UU, incurrió en graves delitos como asesinatos en masa o crímenes de terrorismo.