El jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, inicia el lunes en Colombia una gira por América Latina donde estrechará lazos con aliados clave que desde hace poco son dirigidos por presidentes izquierdistas.
La gira arrancará el lunes, justo al día siguiente de la primera vuelta presidencial en Brasil, en la que el presidente de extrema derecha Jair Bolsonaro enfrentó al ícono izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva. El ganador se definirá en un balotaje el 30 de octubre.
El domingo en la noche, Blinken saludó en Twitter el buen desarrollo de los escrutinios en Brasil y dijo esperar que «la segunda vuelta se realice en el mismo ambiente de paz y deber cívico».
La gira inicia también luego del anuncio el sábado de un intercambio de prisioneros con Venezuela, en el contexto de un nuevo acercamiento entre ambos países, incluso cuando Washington aún no ha reconocido la reelección en 2018 de Nicolás Maduro.
«Jamás habíamos tenido relaciones tan fuertes con el hemisferio sur», aseguró el viernes a la prensa el subsecretario de Estado, Brian Nichols, a cargo de la región América Latina, refutando la idea de que Estados Unidos sea negligente con sus aliados del sur por enfocarse en asuntos en Asia o Ucrania.
Lucha antidrogas
«No juzgamos a los países según se sitúen en el espectro político, sino más bien según su respeto por la democracia, por el Estado de derecho y por los derechos humanos», agregó Nichols.
El lunes y martes en Bogotá, durante su segunda visita a Colombia, Blinken se reunirá con el presidente Gustavo Petro, quien asumió el cargo en agosto como el primer izquierdista al frente de este país.
En la agenda están la implementación del Acuerdo de Paz de 2016, la lucha contra el narcotráfico y sus consecuencias para la seguridad, la salud, el medioambiente y también la inmigración y protección de los migrantes venezolanos, que Washington juzga como «modelo para la región».
En la investidura del presidente Petro, funcionarios estadounidenses dijeron estar dispuestos a un diálogo «abierto y honesto» con el nuevo mandatario colombiano sobre la guerra antidrogas, a la que Petro quiere poner fin por considerar que fracasó.
Colombia, que ha vivido varias décadas de conflicto interno, es el primer productor mundial de cocaína y Estados Unidos su principal mercado.
El miércoles Blinken viajará a Chile y se reunirá con el presidente Gabriel Boric, un exlíder estudiantil de izquierda de 36 años, que se posesionó en marzo pasado.
Asamblea de la OEA
Finalmente, el secretario de Estado viajará a Lima el jueves y viernes para participar en la Asamblea General anual de la Organización de Estados Americanos (OEA), el principal foro político de la región que depende de Washington para su presupuesto anual en más de 50%.
Está previsto que en la Asamblea, que reúne a todos los países del continente, se adopten varias resoluciones en contra de la invasión rusa a Ucrania —con reserva de algunos países—, sobre la crisis política y de derechos humanos en Nicaragua, y la crisis de seguridad en Haití.
Blinken tendrá además una reunión el jueves con el presidente peruano de izquierda, Pedro Castillo, que con poco más de un año en el cargo tiene varias investigaciones en su contra por corrupción y tráfico de influencias.
El Departamento de Estado precisó en un comunicado el viernes que Blinken abordará los temas de democracia, inmigración, derechos humanos y lucha contra el cambio climático en su viaje, temas de importancia para el presidente de Estados Unidos, Joe Biden.
En particular, Washington busca dar seguimiento a la Cumbre de las Américas, realizada en Los Ángeles en junio y en la cual lanzó una iniciativa de alianza sobre la inmigración en América Latina.