La presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, recibió este martes las cartas credenciales de José Cumare, representante del líder opositor venezolano Juan Guaidó, reconocido como presidente interino de Venezuela por unos 50 países.
La mandataria saludó a Cumare en un acto protocolario que se realizó en el Palacio de Gobierno de La Paz, tras el cual el venezolano se retiró sin hacer declaraciones.
La Asamblea Nacional de Venezuela autorizó a principios de mes las designaciones que Guaidó, también jefe de la Cámara, comunicó por escrito a los diputados, quienes aprobaron la moción en una sesión legislativa virtual, en la que no se pudo comprobar el número de parlamentarios presentes ni los votos emitidos.
Aunque el opositor venezolano se refiere a estos representantes como «embajadores», ninguno de ellos cuenta con atribuciones diplomáticas ni capacidad para realizar gestiones requeridas por venezolanos en el extranjero más que la admisión de entrada a naciones amigas con pasaporte vencido por un período limitado.
El gobierno transitorio de Áñez mantiene una política de acercamiento a Juan Guaidó, tras romper relaciones con Nicolás Maduro, en una línea opuesta a la que mantenía el expresidente boliviano Evo Morales.
En el marco de esa política, en diciembre pasado confirmó el ingreso del país en el Grupo de Lima, con miras a contribuir a una salida a la situación en Venezuela, junto con el resto de países latinoamericanos que lo integran y desconocen a Maduro para apoyar como presidente encargado a Guaidó.
El candidato presidencial del Movimiento al Socialismo (MAS), de Morales, Luis Arce, virtual ganador de los comicios generales celebrados el domingo, confirmó este martes en entrevista con Efe que restablecerá las relaciones con el régimen de Maduro.
Además del representante de Guaidó, Áñez también recibió las cartas credenciales de los nuevos embajadores de Egipto, Magda Safwat Abdelhamid; Panamá, Enrique Garrido; Japón, Osamu Hokida; Perú, José Boza, y de la Unión Europea (UE), el austríaco Michael Dóczy.
Cada diplomático se reunió por separado con la presidenta interina, tras lo cual recibieron homenajes militares a cargo de una tropa del regimiento Colorados de Bolivia, la escolta presidencial del país.