Amnistía Internacional denunció en su más reciente informe que el Estado chileno pone en peligro la vida de los migrantes venezolanos al violar sus derechos humanos, pues impide que puedan acceder a un estatus migratorio regular, lo que los deja en una situación absoluta de desprotección.
“El Estado chileno fuerza a la mayoría de las personas venezolanas a ingresar por pasos fronterizos inseguros y no habilitados, pero a su vez las penaliza por entrar de manera irregular y obstaculiza que soliciten asilo”, denunció la organización en su informe titulado Nadie quiere vivir en clandestinidad.
Entre las medidas que Amnistía Internacional identificó como obstáculos para que los migrantes venezolanos puedan regularizarse incluyen la imposición de visados de entrada con requisitos difíciles de conseguir, normas que facilitan las reconducciones y expulsiones inmediatas en vulneración del debido proceso, rechazos en frontera y omisiones en la entrega de información sobre la condición de los refugiados; además del requisito ilegal de autodenuncia, entre otras arbitrariedades.
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La organización señaló que negarles a los migrantes la posibilidad de acceder al procedimiento para ser reconocidas como refugiadas, los pone en grave riesgo de devolución a lugares donde su vida y sus derechos corren peligro.
Ante ello, recordó que estas prácticas constituyen faltas a las obligaciones internacionales contraídas por Chile en materia de derechos humanos.
«Es lamentable que los principales países receptores de personas refugiadas venezolanas en el mundo estén incumpliendo su obligación de garantizar protección a quienes que huyen de Venezuela. Ya hemos documentado los enormes desafíos en Colombia, Perú y Ecuador; y ahora ponemos en evidencia que el gobierno chileno», expresó Erika Guevara Rosas, directora para las Américas de Amnistía Internacional.
Y agregó: «Lejos de romper esta tendencia y otorgarles protección internacional o regularización migratoria, ha venido estableciendo por años una infranqueable carrera de obstáculos para que no puedan establecerse en el país».
Venezolanos en Chile
Chile es el cuarto país de acogida de venezolanos en América Latina y el Caribe. Para el año 2021, se registró 3867 solicitudes de asilo formalizadas, de las cuales 79% correspondía a personas provenientes de Venezuela.
Según cifras oficiales, Chile alberga a unas 444.400 personas venezolanas, una cifra conservadora ya que data de diciembre de 2021. Esto lo sitúa detrás de Colombia, Perú y Ecuador, que han recibido a unas 2.500.000, 1.500.000 y 502.000 personas venezolanas respectivamente.
En conjunto, estos cuatro países latinoamericanos albergan a casi el 70% del total de los 7.17 millones de personas que han huido de Venezuela debido a la emergencia humanitaria compleja, la crisis de derechos humanos, y la posible comisión de crímenes de lesa humanidad.
Amnistía Internacional hace un llamado urgente al gobierno chileno a que garantice el acceso efectivo y sin discriminación de todas las personas con necesidad de protección al procedimiento para el reconocimiento de la condición de refugiado; a que respete el principio de no devolución, incluyendo la prohibición de rechazos en frontera; y a que elimine el requisito de autodenuncia para cumplir con los estándares internacionales de no criminalización de la entrada irregular.