Luis Almagro, secretario general de la OEA, criticó este viernes la «cobardía» del gobierno de Venezuela por la represión a manifestantes opositores y reclamó elecciones lo antes posible en ese país.
«Cuando el liderazgo político da la orden de disparar contra el propio pueblo eso es una señal muy fuerte de cobardía y de debilidad de ese liderazgo político de este régimen venezolano», declaró Almagro a la AFP en Asunción.
El titular de la Organización de Estados Americanos (OEA) consideró que «un gobierno fuerte se sostiene por el poder que le da el pueblo, no con la represión al pueblo», y pidió elecciones urgentes en el país petrolero.
Las protestas en Venezuela se desataron hace tres semanas, luego de que el Tribunal Supremo de Justicia se adjudicara facultades del Parlamento, único poder público controlado por la oposición, aunque luego dio marcha atrás.
La escalada de violencia despertó inquietud internacional y varios países latinoamericanos, la Unión Europea y Naciones Unidas pidieron a Venezuela garantizar las protestas pacíficas.
«No tengo problemas en escuchar insultos»
El secretario general lamentó la veintena de muertos que han dejado las protestas opositoras en Venezuela, que comenzaron el 1 de abril y han dejado también decenas de heridos y detenidos. Además, describió al gobierno de Maduro como «un régimen que tiene las manos manchadas con la sangre de su propio pueblo».
«No hay indignidad más grande en la política», remarcó el ex canciller uruguayo. Doce de las 20 víctimas fatales murieron en disturbios y saqueos ocurridos la noche del jueves y el viernes en Caracas. La canciller de Venezuela, Delcy Rodríguez acusó a Almagro de «alentar la violencia» en ese país, pero el jefe de la OEA rechazó estas acusaciones.
«Yo no tengo problemas en escuchar cien insultos más del presidente Maduro si él llama a elecciones cuanto antes. La salida a las dictaduras son las elecciones», subrayó.
Distensión en Paraguay
Almagro se reunió en Asunción con el presidente Horacio Cartes, con líderes del partido Colorado oficialista y de la oposición paraguaya. Recibió de ellos informes y relatos en torno a la crisis que se desencadenó en Paraguay el 31 de marzo, que dejó un muerto y decenas de heridos, y que se desactivó el lunes con el anuncio de Cartes de desistir de buscar la reelección.
La Constitución paraguaya prohíbe la reelección presidencial, pero la mayoría oficialista intentó introducir una enmienda para restablecerla, lo que degeneró en enfrentamientos de opositores con la policía.
El oficialismo no ha retirado aún su proyecto de cambio de la Constitución, a pesar del anuncio de Cartes. Pero después de sus conversaciones con los líderes políticos paraguayos, Almagro auguró que «el tema va a quedar cerrado en un período breve de tiempo» y elogió la renuncia de Cartes a buscar la reelección.
«El presidente ha demostrado una vez más un espíritu cívico superior y ese paso adelante que fortalece el sistema político del Paraguay», afirmó.
Desestima denuncias de opositor en Ecuador
Preguntado sobre Ecuador, donde el candidato opositor Guillermo Lasso no reconoce la victoria del oficialismo, el secretario dijo que para la OEA, que envió observadores electorales a ese país, ganó legítimamente Lenín Moreno.
«Nuestro conteo rápido había dado en primera vuelta que era necesaria una segunda vuelta. En segunda vuelta dio claramente que había ganado el candidato Lenín Moreno», enfatizó.