Al menos 40 mineros murieron en la explosión de una mina de carbón en Turquía, según un nuevo balance difundido este sábado en el lugar por el ministro del Interior, Suleyman Soylu.
«Contabilizamos en total 40 muertos. 58 mineros pudieron salvarse por su cuenta», declaró Soylu. A su lado, el ministro de Energía, Fatih Donmez, estimó, visiblemente afectado, que se acercaba «el final de las operaciones de rescate».
Mina de Turquía
«Cincuenta y ocho mineros pudieron salir ilesos. Estimamos que 15 de nuestros mineros están atrapados allá abajo e intentamos socorrerlos», declaró este sábado por la mañana el ministro del Interior, que viajó al lugar de la explosión, la mina de Amasra, en la costa del mar Negro.
El ministro de Energía, Fatih Dönmez, también presente en el lugar, explicó que «se produjo un incendio en una de las galerías después de la explosión».
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, anunció que cancelaba su agenda para viajar al lugar del accidente el sábado por la tarde.
«Nuestro deseo es que la pérdida de vidas no sea mayor y que nuestros mineros puedan salir sanos y salvos», tuiteó.
En el momento de la explosión, ocurrida el viernes a las 6:15 pm, hora local, había dentro más de 110 mineros.
La televisión local mostraba imágenes de centenares de personas, muchas de ellas llorando, frente a un edificio blanco dañado cerca de la entrada de la mina.
El ministro de Energía dijo igualmente que, según las primeras observaciones, la detonación se produjo por una acumulación de grisú, gas habitual en minas subterráneas compuesto esencialmente por metano.
Afad, el organismo público de gestión de desastres de Turquía, anunció inicialmente que un transformador defectuoso fue la causa de la explosión, antes de retractarse y decir que se trataba de gas metano que explotó por razones desconocidas.
El rescate continúa
En las tareas de rescate participan los propios mineros. «Hemos sacado los cadáveres de nuestros compañeros, es una cosa horrible para nosotros», dijo uno de ellos, interrogado por el canal privado turco NTV.
«No sé qué pasó. Hubo una presión repentina y no pude ver nada», dijo a la agencia de prensa estatal Anadolu un minero que pudo salir de los túneles por sus propios medios.
En imágenes difundidas por la televisión turca se veía a los paramédicos dando oxígeno a los mineros que habían salido y luego llevándolos a los hospitales más cercanos.
Las galerías accidentadas se encuentran a 300 y 350 metros bajo el nivel del mar.
El alcalde de Amasra, Recai Cakir, indicó a su vez que entre los mineros rescatados hay algunos heridos de gravedad.
Los trabajos de rescate se desarrollaron durante toda la noche, pese a la dificultad añadida de la falta de luz.
La oficina del fiscal local dijo que estaba tratando lo ocurrido como un accidente y que había iniciado una investigación formal.
Los accidentes laborales son frecuentes en Turquía, donde el fuerte desarrollo económico de la última década a menudo se ha producido a expensas de las normas de seguridad, especialmente en la construcción y la minería.
El país sufrió su peor desastre en 2014, cuando 301 trabajadores murieron en una explosión en una mina de carbón en la ciudad de Soma, en el oeste del país.