El adelanto de las elecciones generales en España al 23 de julio anunciado este lunes por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, sorprendió a todo el espectro político español, incluidos los propios socialistas, ya que la decisión sólo la conocía el «núcleo duro» del jefe del Ejecutivo.
En una declaración institucional, Sánchez anunció el adelanto de los comicios, previstos en principio para diciembre, ante los malos resultados cosechados por el Partido Socialista (PSOE) en las elecciones municipales y regionales de ayer, en las que se constató el giro conservador del país con el Partido Popular (PP) como claro ganador.
Fuentes del PSOE señalaron que la decisión del presidente del Gobierno español se gestó entre la noche del domingo y hoy, y que solo la conocían los más cercanos al líder socialista.
Desde el partido de izquierdas Unidas Podemos (UP), socio en el gobierno de coalición nacional con el PSOE, su secretaria general y ministra de Asuntos Sociales, Ione Belarra, aseguró que trabajarán desde este momento en alcanzar un acuerdo para trabajar en conjunto con la formación Sumar, liderada por la vicepresidenta segunda del Ejecutivo, Yolanda Díez.
Hasta el momento, los desencuentros entre ambas formaciones de izquierdas han sido recurrentes, pero el anuncio de Sánchez les obliga a unir esfuerzos.
Además, Podemos fue uno de los grandes perjudicados con los resultados de las elecciones municipales y autonómicas de ayer, que hundieron a este partido y lo desterraron de varios ayuntamientos y parlamentos autonómicos.
Por su parte, Díaz indicó que asume «el reto» de «hacer las cosas de otra manera» en su ámbito político y que «desde este mismo momento» ya están trabajando para salir «a ganar al PP».
«El mensaje recibido anoche fue muy claro: hay que hacer las cosas de otra manera», aseguró.
La presidenta regional madrileña, la conservadora Isabel Díaz Ayuso, que ayer revalidó su cargo con mayoría absoluta, atribuyó la decisión de Sánchez a una «rendición» al estar «en un callejón sin salida» después de que los ciudadanos «de lado a lado» hayan hablado en las urnas.
Según Díaz Ayuso, Sánchez no ha querido aguantar hasta final de año a la convocatoria de elecciones generales para ver si el fracaso del PSOE «no va a mayores», pero se mostró convencida de que no será así.
Tras el anuncio del adelanto electoral, el Congreso y el Senado español desconvocaron toda la actividad parlamentaria prevista ante la inminente disolución de las dos cámaras que debe producirse 54 días antes del 23 de julio.
Sánchez comunicó hoy al rey de España, Felipe VI, la disolución de ambas cámaras, tal y como dicta el procedimiento electoral. El monarca firmará un real decreto de ley para ser publicado mañana en el Boletín Oficial del Estado, en el que se sentarán las bases de los nuevos comicios.
El adelanto de las elecciones impacta además de lleno en la preparación del semestre de Presidencia europea, que España ocupará desde el 1 de julio.