En un evento de campaña en la ciudad de Doral, al Sur de California, el aspirante a la candidatura republicana para la asumir la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, fue criticado por activistas, que exigían respeto e igualdad. También condenaron las acusaciones del magnate inmobiliario hacia los ciudadanos latinoamericanos en el país. La nicaragüense Bertha Sanles fue una de las expulsadas, tras protestar en medio del discurso de Trump, en el encuentro realizado en el recinto Trump National Doral. ?Aquí en Miami, él no es bienvenido, por eso vinimos hasta su casa a dejárselo saber. Él no va a venir a hacer a EE UU grande, porque ya este país es grande?, afirmó. Aseguró que fueron al lugar con la intención de sabotearle el discurso en señal de descontento por los calificativos de Trump.?Nos está poniendo de una manera como que nosotros somos criminales y eso no es así. Ya basta. Él tiene que empezar a aprender a respetar. Nosotros merecemos dignidad y respeto?, manifestó al Diario de La Américas. Por otra parte, la residente de Fort Lauderdale, Elizabeth Roque, consideró al candidato republicano como un gerente que puede hacer «genial» a Estados Unidos. ?Creo que Trump es increíble y que hará que EE UU sea genial nuevamente. Es un hombre de negocios y sabe qué es lo que necesita pasar aquí, en nuestro país. Hará cosas que cualquier otra persona no puede hacer dentro de lo político?, dijo.
