En medio del éxodo que afecta a varios países de la región, 75.560 venezolanos solicitaron regularizar su situación migratoria en Brasil desde 2015 hasta el pasado mes de agosto, según un informe de la Policía Federal divulgado por el gobierno. De esa cifra, 46.761 inmigrantes pidieron ser reconocidos con el estatus de refugiados, 14.935 quieren permiso de residencia, mientras que otros 13.864 pidieron cita con las autoridades para normalizar su estancia, de acuerdo con el Ministerio dela Presidencia en un comunicado.
El flujo migratorio procedente del vecino país se ha intensificado en el último año y medio con el ingreso de miles de venezolanos que huyen de la crisis política, económica y social que atraviesa su nación. Datos oficiales indican que desde 2017 han entrado a la mayor economía de Suramérica 154.920 venezolanos vía terrestre por la localidad de Pacaraima, en el empobrecido estado de Roraima y único paso fronterizo entre Brasil y Venezuela.
El pequeño municipio fue escenario de incidentes violentos en agosto pasado, cuando algunos de sus habitantes quemaron los campamentos y objetos personales de venezolanos. No obstante, algo más de la mitad (79.402) ya han abandonado el territorio, de los cuales 54.560 salieron por fronteras terrestres y 24.842 tomaron vuelos internacionales.
De los que decidieron quedarse en Brasil, cerca de 5.200 están en alguno de los albergues construidos en Boa Vista, capital de Roraima, y dependen de la ayuda humanitaria. De acuerdo con la Policía Federal, otros 1.507 han sido trasladados desde Roraima a otras ciudades del país más ricas.
La medida es una iniciativa del gobierno del presidente Michel Temer, apoyada por organismos internacionales, que intenta reducir la presión migratoria sobre Roraima, cuyos servicios públicos se han visto desbordados.
Primera parada. El Grupo de Trabajo que aprobó el miércoles el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos para debatir la crisis venezolana viajará a Colombia la próxima semana, anunciaron el secretario general del organismo, Luis Almagro, y el ministro de Relaciones Exteriores de Colombia, Carlos Holmes Trujillo.
Tras una reunión, Almagro informó que la OEA emitirá hoy una orden ejecutiva para la creación del grupo, que estará dirigido por el ex alcalde venezolano David Smolansky.
Almagro subrayó que aunque países como Ecuador y Perú están recibiendo un fuerte flujo de inmigrantes venezolanos, Colombia es el país que lleva el principal peso y responsabilidad en atender a esa migración. “Tenemos con Colombia definitivamente una agenda de mucho trabajo porque es un referente importantísimo en los temas regionales”, dijo Almagro.
El Grupo de Trabajo tiene previsto trasladarse a Colombia y a los demás países afectados por la crisis para elaborar un informe sobre la situación y diseñar una estrategia regional. “Tendrá que visitar todos los países, hemos recibido la invitación de Colombia, que agradecemos muy especialmente, para visitar el país la próxima semana y será la primera acción que va a tener el grupo porque el coordinador nos acompañará”, añadió Almagro.
Holmes Trujillo aplaudió la creación del grupo. “La decisión de la OEA supone el reconocimiento del impacto regional de la crisis migratoria proveniente de Venezuela. Va a fortalecer nuestra capacidad para afrontarla y nos permitirá actuar en el espacio multilateral, empezando por lo que haremos juntos en la próxima Asamblea de Naciones Unidas”, puntualizó.
HRW: Éxodo forzado por la dictadura
José Miguel Vivanco, director para las Américas de Human Rights Watch, afirmó que la crisis migratoria venezolana es la más grave de la región. “Un éxodo forzado causado únicamente por la dictadura violenta y sanguinaria del gobierno de Nicolás Maduro… Es claro que el éxodo en Venezuela se caracteriza por la separación de familias. Muchos padres dejan a sus hijos con uno de los padres o con los abuelos para juntar dinero y llevarlos con ellos, pero la realidad con la que se encuentran al emigrar suele ser muy dura y el tiempo de separación termina siendo más largo del previsto”, dijo.
Vivanco instó a los países de la región a ofrecer una protección migratoria temporal para quienes huyen de Venezuela. Se calcula que 2,3 millones de venezolanos han salido desde 2014, pero las cifras no son claras pues no hay registros de las autoridades.