Los vendedores de carnes del estado Vargas se encuentran en medio de un cierre técnico parcial debido a que no tienen productos para vender además de huesos, vísceras y carne de cochino, y cada 15 días reciben la carne regulada entregada por el gobierno porque los ganaderos privados no distribuyen desde hace más de tres meses.
«Cada 15 días el gobierno surte las carnicerías con cortes regulados. La afluencia de clientes ha bajado notablemente porque de 80 clientes diarios, solo 10 realizan sus compras y la mayoría se lleva vísceras porque el cochino es muy costoso», señaló la dueña de una carnicería ubicada en un mercado municipal de Catia La Mar para La Verdad de Vargas.
Agregó que la carne que expende el gobierno debe venderse a precio regulado, es decir, 90 bolívares soberanos el kilo de carne. Este hecho impide que los negocios obtengas los recursos para mantener sus sedes.
Otro vendedor alegó que los productos que llegan a las tiendas no duran más de un día, y que los días siguientes venden huesos y carne de cochino, pero la última es menos frecuente por sus elevados precios.
”Si vuelve a llegar la carne de res de los privados será vendida en 600 bolívares y sale barata”, señaló un empleado de una carnicería, quien detalló que le resulta difícil mantener el negocio. Aseguró que las neveras se están dañando porque ya ni carne tienen para exhibir. “Los freezer permanecen más tiempo pelados que surtidos”, sentenció.
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