La ganadora del Miss Universo, la nicaragüense Sheynnis Palacios, no solo destacó por carisma y belleza, sino también por el vestido que lució, creación diseñador zuliano Nidal Nouaihed.
El vestido que lució Palacios estaba inspirado en las raíces católicas y la singular devoción a la Virgen María del pueblo de Nicaragua.
Nouaihed se ha convertido en uno de los diseñadores favoritos de las reinas de belleza por su habilidad para capturar la belleza y la elegancia en sus trajes.
Sheynnis Palacios se suma a Amanda Dudamel, representante de Venezuela en el Miss Universo 2022, como parte de las reinas de belleza a las que Nouaihed les ha diseñado vestidos para el certamen.
Tras el triunfo de Sheynnis, el diseñador venezolano expresó su emoción y orgullo por el triunfo de la nicaragüense con un vestido hecho por él, describiendo el momento como el más hermoso de su carrera.
«Gracias Chinita, hoy en tu día me diste el regalo más hermoso de mi carrera, gracias por tu bendición», escribió el afamado diseñador.
Otros venezolanos también formaron parte del equipo de la nueva Miss Universo como el maquillador Juan Bautista y el estilista Jean Pier Franco, quienes la ayudaron a prepararse para las fotos promocionales del certamen.
La nicaragüense era una de las candidatas favoritas del Osmel Sousa, quien reconoció su potencial y visión como una digna representante de la belleza y la gracia latinoamericanas. «¡Nunca me equivoco! Felicidades Nicaragua Sheynnis Palacios», publicó en su Instagram.
La nicaragüense Sheynnis Palacios se coronó este sábado como la mujer más bella del mundo en la edición 72 del certamen de Miss Universo, celebrado este año en San Salvador y que por primera vez incluyó a concursantes casadas, de talla grande y a dos mujeres transgénero.
Flanqueada por la tailandesa Anntonia Porsild como primera finalista, Palacios, de 23 años, recibió la corona y la banda por parte de su antecesora, la estadounidense R’Bonney Gabriel.
Esta es la primera vez que Nicaragua gana el Miss Universo, en la que la australiana Moraya Wilson quedó como segunda finalista.
Palacios, que considera la humildad y la gratitud por las pequeñas cosas como sus principales cualidades, triunfó entre 84 concursantes que durante una semana estuvieron en competencias preliminares en traje de baño, vestidos de noche y tradicionales.
La representante de Nicaragua destacó en la pregunta final del jurado la importancia de la igualdad salarial para que las mujeres puedan trabajar en cualquier área. «No hay límite para la mujer», dijo.