Shudu, la primera modelo digital del mundo, aparece con una interesante e inquietante contraposición. ¿Si las modelos humanas pueden llevar una vida irreal en redes, por qué no atreverse a presentar un prototipo tecnológico?
En 2017 el fotográfo de moda Cameron James Wilson asumió el reto de crear la primera modelo digital del mundo sin la ambición de convertirla, años más tarde, en un referente de talla mundial. «La modelo Shudu está basada en una Barbie que me encantaba, y que se llamaba Princesa de Suráfrica. También me inspiré en modelos con las que crecí, mujeres como Grace Jones o Alek Wek, que rompieron el molde y le mostraron al mundo que hay otro tipo de belleza más allá de los estándares occidentales», compartió en el 2018 durante una entrevista con el diario El País.
Con su piel tersa y brillante, Shudu ha logrado hacerse un lugar importante en la industria. Protagonizó campañas de importantes marcas como Dior y Tiffany & Co. y creó una legión de más de 190 mil seguidores en su cuenta de Instagram.
En la actualidad, Wilson es además dueño de la primera y única agencia de modelos digitales en el mundo, contando con Shudu como su debut. The Diigitals, nombre con que bautizó a la empresa, tiene siete identidades digitales, un hombre, cinco mujeres y un alien.
Ellos son presentados en la web oficial de la agencia como una exploración digital que promete acabar con las barreras de la industria y hacer de la moda un universo repleto de posibilidades a futuro.
Sin embargo, también ha existido controversia alrededor de esta innovación, pues están los que cuestionan el hecho de emplear modelos digitales que le quitan oportunidad de trabajo a personas de carne y hueso.