Podría decirse que 99% de los niños, en algún momento de su vida, han incluido la petición de una mascota en la carta al Niño Jesús. Pero si está pensando en regalar una a su hijo o ya está decidido, hay varias cosas para tener en cuenta.
Esta es una decisión que se debe tomar con calma, no solo con la emoción o porque los niños sueñan con tener un perrito.
Entre otras consideraciones, se debe pensar en el estilo de vida que se lleva en cada casa, en el espacio que tendrá el animalito, en las condiciones económicas de la familia y en el tiempo que se requiere para los cuidados.
Para la experta en comportamiento animal Carolina Alaguna, la llegada de una mascota al hogar debe involucrar a todos los miembros de la familia. “No estoy de acuerdo con el animal como regalo de Navidad. Ellos no son juguetes, son seres vivos”, dijo.
Aunque está convencida de que es bueno que los niños tengan la oportunidad de crecer con animales, no cree que deba ser una sorpresa. Debe ser una decisión de familia. “Una mascota ayuda a los niños a crear empatía con la naturaleza y hace que expandan el círculo de compasión, para lo cual la llegada debe ser compromiso de todos”, comentó.
Explicó que hay que tener claro que el cuidado de la mascota no se les puede delegar por completo a los niños; el responsable es el adulto. Sin embargo, ellos deben asumir algunas responsabilidades y cumplirlas. Un animal de compañía requiere desde paseos diarios, baño, alimentación hasta visitas al veterinario. El problema de delegar todo el trabajo en los niños es que pueden no hacerlo bien o se pueden cansar, y es ahí cuando muchas veces toman la decisión de abandonar a la mascota.
Generalmente, la llegada de un cachorro altera toda la dinámica familiar. La mayoría es de carácter inquieto, hacen daño, hay que enseñarles a ir al baño, lloran de noche, entre otras cosas. Es un proceso que implica paciencia y tiempo.
Para Alaguna, la llegada de un perro a una casa debe ser cuando el niño tenga por lo menos 6 años de edad para prevenir accidentes.
Adopte, no compre
Aunque en el mercado abundan las tiendas donde venden perros y gatos de todas las razas y características, los expertos coinciden en que la mejor opción es adoptar. En todas las ciudades hay fundaciones y hogares donde acogen perros y gatos –abandonados o callejeros– con el fin de recuperarlos, sanarlos y prepararlos para conseguirles un nuevo hogar.