Tank, el perro pastor alemán del famoso youtuber británico Deji Olatunji, debe ser sacrificado por haber atacado a una anciana hace más de un año. Así lo ordenó el Tribunal de la Corona de Cambridge.
La sentencia también incluye multas de varios miles de dólares tanto para el propio Deji, de 22 años de edad, como para su madre. Ambos tendrán que compensar las lesiones sufridas por Jennifer Selby-Springthorpe, a la que el perro mordió mientras la mujer visitaba a su familia, que vive al lado de la casa de los Olatunji.
¿Cómo ocurrió?
El pasado octubre, Deji, que cuenta con casi 10 millones de suscriptores en YouTube, y su madre, Olayinka, admitieron haber cometido el delito de manejar de manera irresponsable un perro peligroso.
No obstante, este martes, antes de pronunciar la sentencia, el juez David Farrell destacó «la completa falta de remordimiento» que el youtuber mostró después de que su perro atacara a la mujer de edad avanzada. Según el magistrado, varios videos que Deji publicó en su canal de YouTube lo muestran claramente.
«Usted acusó falsamente a la policía de racismo y publicó constantemente videos que hacían referencia a sus vecinos. Llamó tonta, zorra e idiota, entre otras cosas, a la señora herida», reprochó el juez a Olatunji.
De acuerdo con el juez, en el momento del ataque, que ocurrió en las inmediaciones de la casa de los Olatunji, el perro tenía 13 meses, reseñó RT.
La madre de Deji dejó que el animal saliera de la casa, momento en que atacó a la anciana. La mujer estaba cerca de la entrada del domicilio de los Olatunji, para que le entregaran un paquete que habían recogido en su nombre.
«Por lo tanto, Jennifer había sido invitada a entrar y, cuando estaba a punto de irse, las puertas automáticas se cerraron. Quedó atrapada en el área de entrada mientras Tank escapó y luego la atacó brutalmente», anunció el juez dirigiéndose a los Olatunji.
El magistrado subrayó que el incidente fue captado por una cámara de seguridad.
El youtuber finalmente salió de su casa, pero tampoco pudo controlar al perro. Luego atacó a otro hombre, aunque este, por fortuna, no sufrió heridas graves.
Sobre las multas del youtuber
Como resultado, la anciana sufrió heridas punzantes en el muslo y contusiones profundas. La llevaron a un hospital para recibir tratamiento, pero días después del incidente su herida se infectó. Actualmente, está en buen estado de salud.
De acuerdo con el fallo judicial, Deji tendrá que pagar una multa de 3.280 dólares, mientras que a su madre se le dictó una orden comunitaria de 12 meses y 80 horas de trabajo no remunerado. Deberán pagar alrededor de 10.500 dólares en compensación a la víctima.
Además de las dos multas individuales, ambos tendrán que pagar 10.000 dólares para cubrir los gastos de la perrera que mantendrá a Tank mientras espera ser sacrificado.
A los dos acusados también se les emitió una orden de restricción que les prohíbe contactar personalmente con la víctima y hacer referencia a ella en las redes sociales durante cuatro años.
Las redes sociales se pronunciaron
Después de conocer la sentencia, Deji publicó un nuevo video y compartió sus emociones con los suscriptores. Dijo que apelará el fallo judicial para salvar la vida de su mascota.
El video recibió muchas muestras de apoyo de parte de los seguidores del youtuber, y este 18 de diciembre los usuarios habían publicado más de 17.000 comentarios reprochando la «crueldad» de la decisión judicial y criticando a los vecinos de los Olatunji.
En Instagram, donde Deji tiene 2,5 millones de seguidores, y en Twitter aparecieron las etiquetas «salvemos a Tank» y «salvemos al perro Tank» con llamamientos a firmar una petición para evitar el sacrificio.
El texto de la petición afirma que la mujer atacada conocía al perro desde que tenía 10 semanas, tres semanas antes del incidente. Asimismo, sugiere que «Tank salió corriendo a jugar con ella, pero ella reaccionó agresivamente gritando y golpeando al perro repetidamente con el paquete».
«Como consecuencia de los golpes, el perro sufrió cortes y contusiones en la cara, lo cual provocó que Tank la mordiera una vez. Más tarde la mujer llamó a la policía y pidió que el perro fuera sacrificado», reza la petición.
Los Olatunjis tienen 28 días a partir del viernes para apelar contra la decisión judicial de sacrificar a su mascota.