Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos informaron que el número de intoxicaciones por mal uso de los artículos de limpieza, en particular cloro y alcoholes en gel, aumentó 20%. Esta situación se ha presentado a consecuencia de la pandemia del coronavirus y al aumento de la limpieza en los hogares para evitar contagios.
Uno de los ejemplos que encontraron fue el de una mujer que para limpiar la fruta y verdura, usó una mezcla de agua caliente, vinagre y cloro a 10%. Esta combinación provocó una reacción química, y al inhalar los vapores, la mujer tuvo que ir a un hospital cercano en el que recibió oxígeno y tratamiento para la peligrosa afección. Pero, ¿cuán peligroso son los clásicos productos que se venden en los supermercados, para desinfectar las casas?
Mario Faúndez, toxicólogo y académico de la Facultad de Química y Farmacia de la Universidad Católica, advierte acerca de las diferentes mezclas que jamás se deben realizar. Asimismo, señala cuál es el mal uso de los artículos de limpieza, sobre todo del cloro, un artículo que se está aplicando cada vez más en los últimos días.
Primero, Faúndez señala que la mayoría de los productos que hay están elaborados con cloro. «Lo correcto es usarlo súper diluido con agua de la llave. Se pone más o menos dos cucharadas soperas en un litro de agua. Con eso se tiene una disolución desinfectante fantástica, sin ningún riesgo», ejemplifica el toxicólogo. El experto señala que el cloro concentrado siempre debe usarse con guantes para evitar quemaduras químicas.
Las mezclas
Sin embargo, el académico cree que los problemas se generan cuando las personas empiezan a realizar mezclas de productos de limpieza para «aumentar su efectividad», lo cual no es necesario. Uno de los más peligrosos es la mezcla de vinagre con cloro, indica Faúndez. El vinagre tiene un ácido que cuando se mezcla con hipoclorito de sodio se genera un gas que se llama gas cloro. El experto explica que este gas cloro cuando está denso se mezcla con el agua de la mucosa nasal, de la boca y los ojos y se transforma en ácido clorhídrico, que se conoce como ácido muriático.
Es decir, puede destruir membranas y causar heridas o quemaduras químicas graves. «Toda la vía área se puede ver seriamente afectada solo con respirarlo», añade, e indica que esto dependerá de las concentraciones. Cuando el cloro está muy concentrado y se mezcla con ácidos fuertes es muy peligroso. «Este gas cloro fue un arma química utilizada en la Primera Guerra Mundial», advierte.
Otras de las prácticas relacionadas sobre el mal uso de los artículos de limpieza es cuando las personas utilizan ácido muriático para limpiar el sarro y después usan cloro para blanquear. «Ahí estás mezclando ácido con cloro y queda la escoba», indica. Además, señala que se debe tener precaución con productos con amonio, como los limpia baños. Al mezclar estos con cloro se puede liberar un poco de amoníaco, lo cual es tóxico para las vías respiratorias.
«Nunca mezclar los productos, usarlos por separado bajo las instrucciones que vienen desde el fabricante», añade. Otra de las mezclas peligrosas que detalla Faúndez es el «calentar cloro». «Se libera un porcentaje de gas cloro, que es menor en todo caso que al mezclarlo con ácido, pero también peligroso. Hay gente que lo calienta directo o agua caliente», indica.
Finalmente, el toxicólogo advierte que los limpiavidrios deben usarse alejados del cloro y si se va a utilizar uno se debe lavar con abundante agua para poder añadir el otro. Sin embargo, cree que no es necesario usar ambos, ya que se «redunda».
¿Cuándo se debe ir a urgencias?
Ricardo Valenzuela, urgenciólogo de Clínica Universidad de los Andes, coincide con el toxicólogo y enfatiza en la importancia de usar los productos de forma exclusiva y no mezclarlos. El médico indica que en caso de presentarse síntomas como enrojecimiento de ojos, ardor en las mucosas nasales al respirar, náuseas y vómitos, si se siente la garganta apretada, si tienen conductas aberrantes, si empieza a haber rinitis, o si hay compromiso de conciencia o conductas diferentes a las que tenía siempre, se debe ir a un servicio de urgencia de inmediato. «Ojalá llevar el envase del producto que ingirió o inhaló», añade.
Las consecuencias que puede tener una persona dependen del contexto. Si se ingiere cloro, lo cual es raro en adultos, y se bota antes de tragarlo puede producir irritación de la mucosa bucal. Pero, si se traga puede causar esofagitis, quemaduras de estómago, ruptura en sus paredes, entre otras cosas, lo cual es muy grave, señala Valenzuela.
«Si llega a vomitar el contenido de cloro y lo aspira va a producir una neumonitis química, que es extremadamente grave», añade. El médico enfatiza en dejar fuera del alcance de los niños los productos de limpieza y advierte sobre el alcohol gel y su poco consumo común. Valenzuela señala que algunos jóvenes en otros países lo han usado para embriagarse, lo que sería una práctica muy peligrosa.
«Está fabricado entre 60% y 90% de alcohol etílico; por tanto, produce el mismo efecto al tomarlo que tomarse cinco o seis vasos de whisky. Se puede llegar a una intoxicación etílica que va desde el típico mareo sensación de adormecimiento a crisis convulsivas «, advirtió.