Las relaciones sexuales, al igual que cualquier otra faceta de la vida, se benefician de la chispa de la novedad. La monotonía puede convertirse en el peor enemigo de la pasión. Pero, ¿cómo podemos mantener viva esa llama a lo largo del tiempo? La respuesta parece ser simple, pero poderosa: incorporar novedades sexuales.
En el terreno de la sexualidad, la rutina puede ser una fuerza sigilosa que apaga gradualmente la pasión que alguna vez ardió intensamente. Muchas parejas se encuentran con el dilema de querer recuperar el deseo perdido, pero no saben cómo hacerlo o simplemente no tienen las ganas. La creencia errónea de que el deseo sexual debe surgir espontáneamente sin esfuerzo es un mito que ha llevado a la frustración a muchas parejas y que tiene como resultado frustraciones, discusiones y como resultado, menos sexo.
En las relaciones a largo plazo, integrar nuevas experiencias que les permita diversificarse en el ámbito sexual es necesario para encender esta emoción o “cosquillita” que recuerdan los primeros encuentros. ¿Qué significa esto exactamente? Significa romper con la monotonía e integrar nuevas prácticas, escenarios o comportamientos para evitar que el entorno sexual se vuelva predecible.
La rutina no excita y lo nuevo atrae
La clave es ser creativos e introducir sorpresas que rompan la rutina y generen un aire de misterio, de incertidumbre, de cambio y emoción. Los expertos sugieren integrar al menos 12 novedades al año. Pero no se alarmen, que esto no es tan difícil.
Hay cosas sencillas que se pueden practicar y con muy buenos resultados. Por ejemplo:
- Si siempre se tiene sexo en el cuarto, pueden moverse a otro lugar de la casa.
- Usar ropa interior diferente, encender velas y ambientar el escenario.
- Integrar música sensual.
- Hablarse al oído, leerse en voz alta una novela erótica, hasta la exploración de fantasías compartidas.
“La seducción, se convierte en un elemento clave antes, durante y después del acto sexual. ”
El secreto no está en una pastilla mágica, sino en que ambos tengan la disposición para explorar, experimentar y cultivar un sentido de aventura en el ámbito sexual.
La novedad sexual es un catalizador que puede revitalizar una relación, llevándola a nuevas alturas de conexión y satisfacción. En lugar de esperar a que el deseo regrese por sí solo, ambas partes deben comprometerse a ser creativos para mantener la pasión, utilizando la novedad como el ingrediente esencial para mantener viva la llama del amor y la intimidad.