A finales de agosto, Lawrence Scheele se encontraba buceando en la Gran Barrera de Coral, Queensland, cuando se topó con una inusual criatura que se parece a un ojo humano. Su anatomía era igual a la de un globo ocular con párpados y pestañas.
El ejemplar, aunque curioso y de aspecto extraño, es en realidad una almeja de la especie Lima scabra, uno de estos pocos moluscos que nadan solos.
La almeja Lima scabra también se conoce por el nombre de vieira de fuego, vieira en llamas o vieira áspera, a pesar de que no guarda ninguna relación con las vieiras, salvo su gran parecido.
Se trata, en realidad, de un molusco bivalvo marino que se encuentra comúnmente a lo largo y ancho del mar Caribe.
Estas criaturas marinas, parecidas al ojo humano, poseen valor como especie ornamental en acuarios debido a la belleza de sus conchas y sus largos tentáculos.
También destacan por su llamativa pigmentación roja. Es un animal difícil de mantener debido a los cuidados especiales que requieren.