Un grupo de manifestantes se coló este jueves en el famoso desfile de Acción de Gracias en Nueva York. Durante unos minutos fue interrumpido con una pancarta que instaba a “salvar Palestina y el planeta”, aunque el evento no perdió su ambiente festivo y familiar y finalizó sin incidentes.
En torno a las 10-00 GMT (15-00 GMT), una decena de activistas saltó las vallas que acotaban la Sexta Avenida por la que discurre el desfile casi centenario, a la altura de Times Square. En el ínterin gritaron consignas mientras escenificaban su muerte tumbándose en el suelo y vertiéndose líquido rojo por encima.
La protesta pareció sorprender a todos e incluso a la misma policía, ya que se produjo pese a unas medidas de seguridad reforzadas por el conflicto entre Israel y Hamás, y con la conmoción reciente por el vehículo que estalló ayer cerca de las cataratas del Niágara, suceso en el que se descartó el terrorismo como causa.
Los activistas, que gritaron “Free Palestine”, llevaban monos blancos con las palabras consumismo, capitalismo, colonialismo, limpieza étnica o militarismo. Pertenecían, según su pancarta, a la organización Seven Circles Alliance, que se describe como una coalición climática y anticapitalista.
Desfile, protestas, polémica
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La Policía acudió a detener a los manifestantes pero algunos se habían pegado al suelo, lo que dejó una curiosa estampa, ya que se pudo ver a todos esperando unos 20 minutos mientras eran sorteados por bandas de música, carrozas y enormes globos de personajes como Pikachu.
“Tenemos que liberar Palestina, tenemos que curar la Tierra”, gritaba un joven manifestante esposado y custodiado por agentes. Mientras, por detrás pasaba una vistosa carroza de la marca Lego, con bloques de colores, y presidida por el cantante colombiano Manuel Turizo, que iba saludando.
En otros puntos del desfile, pero ya tras las vallas, también hubo manifestantes propalestinos que levantaron banderas entre el público y carteles que pedían “frenar a Israel” y “dejar de financiar el genocidio»; pero en todo caso no se produjeron más intercambios que gritos y abucheos.
Las calles de la ciudad estuvieron repletas de gente; la mayoría familias y grupos de amigos, y especialmente la Quinta Avenida, cerrada al tráfico y con las tiendas preparadas para la temporada navideña.
El Día de Acción de Gracias es el festivo más popular del país; los estadounidenses se reúnen en casa para comer el tradicional pavo asado. Después se entregan a una fiesta del consumismo que va desde el viernes, conocido como Black Friday, hasta el lunes, bautizado como Cyber Monday.