GASTRONOMÍA

Bagels y ciabattas bien montadas

por Avatar EL NACIONAL WEB

De la lista de bagels rellenos de Yeasty Buns el que más gusta es el de salmón ahumado con queso crema, que también lleva eneldo fresco, cebolla morada y alcaparras bebé. “Curo el pescado con sal y papelón, envuelto en hojas de plátano”, explica John Navas, que dejó la ingeniería química por la panadería y la pastelería, y recuerda que la receta tradicional que se utiliza en la elaboración de este pan exige hervir la masa y dejarla fermentar un día antes de hornearse, además de coronarla con semillas de ajonjolí o amapola.

Navas también rellena sus bagels con pastrami –hecho a partir de muchacho redondo, curado por 10 días con pimienta blanca y negra, y semillas de cilantro, hinojo y mostaza– y queso amarillo; con pollo, tomates confitados, boconccini y rúgula; y con huevo revuelto, espárragos grillados, queso Santa Bárbara y tocineta rociada con melado de golfeado.

“El último se llama brunch bagel”, dice el panadero, que también ofrece ciabattas de jamón, boconccini y rúgula, además de bollería –golfeados, croissants y pain au chocolat–, tartaletas de frutas de temporada o de chocolate oscuro, nueces y miel, y ensaimadas rellenas con crema pastelera y espolvoreadas con azúcar glas, último producto en incorporarse a la lista.

¿Más? Navas, que abrió su centro de producción el año pasado en sociedad con su padre –de quien heredó el nombre y a quien dejó la administración del negocio– trabaja con tres masas madre que, como dicta la tradición panadera, tienen nombre y ficha de nacimiento: Cleo es la mayor, nació en El Cairo en 1906 y fue adquirida en una tienda especializada de Italia –“la alimento con trigo y centeno para obtener el punto ácido que exige la masa de ciabatta”–, Frank, de 1960, procedente de San Francisco, y Paco, la más joven, de 2017, que llegó de Alicante.

El dato

Yeasty Buns ofrece servicio de entrega a domicilio y los pedidos deben hacerse con al menos un día de antelación a través de la cuenta IG @yeastybuns. Panes y bollería, sin relleno –incluso bagels y ciabattas– se venden en paquetes de 12 unidades.