Muchas campañas alertan de los daños que causan los rayos solares durante el verano, así de cómo afecta teñirse el cabello en la hidratación del pelo. Por ello, es importante tener los cuidados necesarios para evitar cualquier daño, tanto en la piel como en el cabello.
A pocos días de que termine la temporada de calor, el cabello se encuentra en estado vulnerable, a causa de la radiación solar, el agua salada, el cloro de las piscinas y otros componentes. ¿Qué hacer para que esté brillante y perfecto? ¿Será recomendable teñirlo?
Raphael Mejía, dermatólogo de la clínica Internacional, comenta que la radiación solar daña la cutícula del cabello, por lo que sugiere teñirse el cabello en primavera.
“Una tinturación con químicos es sobreexponerlo al daño, ya que actúan sobre la fibra capilar permitiendo que ingresen pigmentos que cambian el color del cabello. Es importante recordar que el tiempo de exposición al tinte capilar va a influir en la salud del cabello. Se debe tratar de aplicar tintes con intervalos mayores a cinco o seis semanas”, explica.
También recalca que antes de teñirse el cabello es necesario contactar a un especialista para conocer el estado de la salud capilar.
“Enfermedades como la psoriasis, la dermatitis seborreica o la caída capilar deben limitar la aplicación de tintes, principalmente debido a sus componentes químicos. Estos pueden ocasionar daños a la salud por su contenido de plomo, amonios y peróxidos. El uso excesivo de estos componentes podría ocasionar desde irritaciones del cuero cabelludo hasta alteraciones del sistema inmunológico en el organismo”, indica.
Por su parte, el dermatólogo Yaril Raúl Moreyra Vásquez, de la clínica Ricardo Palma, opina que es preferible pintarse el cabello en invierno. En verano está más expuesto a factores agresivos como la radiación solar, el agua de mar y el cloro de las piscinas. Por lo tanto, la aplicación del tinte sería añadir un factor agresivo más al cabello.
“Antes de usar un tinte para el cabello por primera vez se debe hacer una prueba para determinar si se es alérgico o no al producto que se va a usar. La prueba consiste en aplicar una pequeña cantidad del tinte en el pliegue del antebrazo, dejarlo de 24 a 48 horas, y observar si se presenta enrojecimiento, hinchazón, prurito o ardor en la zona. De ser así, no debe aplicarse el producto”, dice Moreyra.